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Nueva Delhi.— La policía busca al propietario de una tienda que almacenaba explosivos junto al restaurante donde una detonación provocó al menos 88 muertos y cerca de 100 heridos, el sábado pasado, en el estado indio de Madhya Pradesh, cuyo gobierno ofreció una recompensa por capturar a los culpables, informaron ayer fuentes oficiales.
“Las labores de rescate ya han terminado”, dijo la superintendente adjunta de la Policía del distrito de Jhabua, Seema Alva, en alusión a los trabajos de búsqueda de posibles supervivientes entre los escombros del edificio que se derrumbó.
Inicialmente la policía informó que un cilindro de gas había explotado la mañana del sábado en un restaurante, provocando una segunda explosión en una tienda ubicada al lado que almacenaba explosivos en la localidad de Petlawad, en el estado de Madhya Pradesh.
Sin embargo, testigos aseguraron que la primera detonación ocurrió en una tienda que posee licencia de venta de explosivos y después en el restaurante, según la agencia Press Trust of India (PTI).
El propietario del local donde se almacenaba un tipo de explosivo utilizado en minería en la zona, Rajendra Kasawa, está siendo buscado, afirmó Alva.
El hombre está acusado de cargos de homicidio, declaró un portavoz policial, A. R. Khan, a la agencia PTI.
El jefe de gobierno regional, Shivraj Singh Chouhan, visitó la zona de la explosión y a varios de los heridos en el hospital, aunque a su llegada una multitud le impidió durante unos momentos el paso mientras acusaba a las autoridades de negligencia en el control de explosivos, según recogieron televisiones locales.
Chouhan anunció una recompensa de mil 510 dólares para quien ayude a capturar a los culpables. En 2009, una docena de personas falleció, la mitad niños, y unas 20 sufrieron heridas al estallar un cargamento de gelatina explosiva almacenado en una vivienda en el estado meridional de Andhra Pradesh.
