Bruselas.— Los países europeos se reunirán de urgencia el próximo 14 de septiembre para tratar de encontrar respuestas inmediatas a lo que califican de “situación sin precedentes” por la “llegada excepcional” de inmigrantes y demandantes de asilo político.
El anuncio del consejo extraordinario de los ministros europeos de Interior y Justicia fue realizado por la presidencia luxemburguesa de turno, que atendió de esta forma el llamamiento realizado ayer por Francia, Alemania y Reino Unido.
La convocatoria coincidió con una ola de declaraciones de líderes europeos sobre la necesidad de actuar ya para asegurar que los refugiados políticos sean acogidos y los inmigrantes indocumentados por motivos económicos sean repatriados a sus países.
“La situación del fenómeno migratorio fuera y dentro de la UE ha adquirido proporciones sin precedentes”, dijo el gobierno luxemburgués.
La Agencia de Control de Fronteras Exteriores (Frontex) de la UE y la Oficina Europea de Apoyo al Asilo (EASO) informarán en la reunión urgente a los ministros comunitarios de los flujos migratorios.
Una vez escuchado ese análisis, los ministros se centrarán en coordinar “la política de devoluciones, la cooperación internacional y las medidas para prevenir el tráfico con migrantes”.
En tanto, al menos 37 personas murieron cuando un bote que trasladaba inmigrantes se hundió frente a las costas de Libia ayer, informaron autoridades, el segundo fatal accidente que se produce en el mar en días. Mientras que en el mar Egeo murió un inmigrante de 17 años en un tiroteo entre un barco patrulla y traficantes de personas.
La policía húngara, por su parte, anunció la detención de un quinto sospechoso, un ciudadano búlgaro, en relación con los 71 inmigrantes hallados muertos el jueves en un camión en Austria. Hecho por el que el papa Francisco pidió cesen los crímenes contra los refugiados. “Pidamos por la misericordia de Dios y pidámosle que nos ayude contra esos crímenes contra la familia humana”, declaró tras el rezo del Ángelus en el Vaticano.
Hungría, nación por la que acceden al oeste de la UE gran parte de los refugiados que transitan la ruta de los Balcanes, anunció que terminó de levantar la controvertida valla de 175 kilómetros en la frontera con Serbia. Pero como la cerca no está cumpliendo las expectativas de frenar el paso de migrantes, el gobierno planea levantar una segunda valla de cuatro metros de alto, que estaría lista a fines de octubre.
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, criticó al respecto que “Hungría no respeta los valores europeos comunes”.
Italia exigió una ley europea de asilo: “El tiempo de permanecer callado se acabó. Hay que cambiar el acuerdo de Dublín y tiene que haber una política de refugiados europea con un derecho de asilo europeo”, dijo el primer ministro, Matteo Renzi, quien añadió que Europa debe “dejar de conmoverse y empezar a moverse”.