Un inmigrante marroquí, de 27 años, fue hallado muerto dentro de una maleta en el vehículo de su hermano, que hacía la travesía en barco desde la ciudad española de Melilla (norte de África) hasta Almería en el sur de España.
Los hechos ocurrieron en la tarde de ayer domingo, según informaron hoy a Efe fuentes policiales, que explicaron que el hermano de la víctima, de 34 años, que tiene pasaporte francés aunque es de origen marroquí, fue detenido.
El joven falleció por asfixia en el interior de la maleta tras un viaje de más de cinco horas y con altas temperaturas, informaron las autoridades locales y fuentes policiales.
El cadáver fue descubierto por su hermano cuando regreso al coche que había realizado el trayecto desde Melilla a Almería en el buque 'Sorolla', de la compañía Trasmediterránea.
El propietario del vehículo y hermano del fallecido, que solo fue identificado por las iniciales de su nombre, A.M., bajó a la bodega del buque para desembarcar en el puerto almeriense con su coche, momento en el que avisó de que su hermano estaba en la maleta con síntomas de asfixia.
Los servicios sanitarios del barco intentaron reanimarle y posteriormente fue asistido por una ambulancia en el muelle, pero ya había fallecido.
Fuentes de la compañía Trasmediterránea informaron a Efe de que la bodega de los barcos, como indica la normativa internacional, permanece siempre cerrada durante la travesía y sin posibilidad de acceso de ninguno de los pasajeros que viajen con su coche, salvo que necesite recoger algún objeto personal olvidado y lo comuniquen a la tripulación del buque.
En ese caso, el pasajero puede bajar desde las cubiertas hasta el garaje acompañado por un miembro de la tripulación, una medida establecida en los procedimientos de seguridad a la que no recurrió el hermano del polizón, que fue a recoger su coche cuando el buque ya estaba entrando en el puerto de Almería y los pasajeros fueron avisados por megafonía para el desembarque.
Según el subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés García Lorca, la entrada ilegal en España "cada vez es más difícil debido a que los controles que existen en los sistemas portuarios y aeroportuarios son más rigurosos".
También dijo que durante 2015 se han detectado en el puerto de esa ciudad andaluza más de 40 polizones ocultos en coches y camiones que llegan en los barcos, mientras que el pasado año fueron detectados un total de 132.
El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, defendió los controles de seguridad que se efectúan en las fronteras terrestres, marítimas y aéreas de la ciudad autónoma para evitar casos como éste.
"Por muchos controles que hagamos, siempre habrá alguien que busque la manera de retorcer el derecho y burlar los dispositivos", dijo El Barkani a preguntas de los periodistas.
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