El papa Francisco volvió a Quito, donde hoy ofrecerá una visita de cortesía al jefe de Estado, Rafael Correa, y visitará la Catedral Metropolitana, situada en el centro histórico de la capital ecuatoriana.
El sumo pontífice llegó desde Guayaquil (suroeste) a donde se desplazó esta mañana para ofrecer una misa multitudinaria, visitar el Santuario de la Divina Misericordia, y reunirse con la comunidad de los Jesuitas en esa ciudad costera.
En el centro histórico, catalogado Patrimonio Cultural de la Humanidad, el papa se reunirá con el jefe de Estado en el palacio de Carondelet, sede del Ejecutivo, que luce decorado con banderas y flores, entre otros.
Tras su encuentro con el gobernante, el sumo pontífice se dirigirá a la vecina Catedral Metropolitana, en donde terminará su jornada de hoy, la segunda en Ecuador a donde llegó ayer cuando inició una gira latinoamericana, que lo llevará también a Bolivia y Paraguay.
Entre otras actividades, el papa ofrecerá mañana en Quito una misa multitudinaria en el parque del Bicentenario, donde antes funcionaba el aeropuerto internacional de Quito.
