Al menos 21 personas murieron al hundirse el barco a bordo del que viajaban en el río Nilo, después de que chocara con otra embarcación, en el norte de El Cairo, según el último recuento de víctimas facilitado por fuentes de seguridad.
Además de los fallecidos, cinco personas resultaron heridas y nueve salieron ilesas del agua, mientras que las labores de rescate continúan en estos momentos para recuperar los cadáveres de los demás pasajeros.
El accidente se produjo anoche frente a las costas del barrio de Al Warraq, situado en la ribera este del río Nilo, en el norte de la capital egipcia.
En el lugar del suceso se registraron escenas de dolor entre los familiares de las víctimas y uno de los parientes intentó saltar al agua.
El Ministerio del Interior anunció anoche en un comunicado que 15 personas habían perdido la vida y seis habían resultado heridas, mientras que el portavoz del Ministerio de Sanidad, Hossam Abdel Gafar, rebajó a 14 el número de fallecidos.
La embarcación siniestrada era de tamaño mediano y estaba realizando un paseo por el Nilo, cuando chocó con un barco de carga de mayor eslora, denominado "sandal" en árabe.
El barco siniestrado se hundió debido a los graves daños provocados en su estructura por el impacto.
La fiscalía egipcia ordenó hoy la detención preventiva durante cuatro días del conductor de la embarcación de carga y de tres de sus ayudantes mientras se desarrollan las investigaciones, según la agencia de noticias estatal Mena.
A los cuatro detenidos se les acusa de homicidio involuntario y de infringir las normas de transporte marítimo.
Los hundimientos de embarcaciones son relativamente comunes en el Nilo, sobre todo por el precario estado de las embarcaciones y la sobrecarga de viajeros.
Asimismo, muchos egipcios no saben nadar, lo que hace que, en caso de accidentes, la mayor parte de los pasajeros perezca.