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El papa Francisco concluyó este viernes su visita a Bolivia y partió rumbo a Paraguay, en la última parada de su gira por Sudamérica.
Sin ningún discurso, el presidente Evo Morales despidió al pontífice en las escalinatas del avión de Alitalia que lo llevará a Asunción.
El pontífice subió las escalinatas con su tradicional maletín de cuero negro y agitó la mano antes de que se cerrara la puerta de la aeronave.
Francisco viajó hacia el aeropuerto en su papamóvil, aunque antes de llegar ahí lo dejó y subió a un vehículo cerrado.
Al acto también asistieron los ministros de Exteriores, David Choquehuanca, y de Gobierno (Interior) , Carlos Romero; el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas; la presidenta de la Cámara de Diputados, la oficialista Gabriela Montaño, y los representantes de la Conferencia Episcopal Boliviana.
En el tercer y último día de su visita, el pontífice se reunió con los reclusos de la cárcel de Palmasola, la más conflictiva del país, y también tuvo un encuentro con los obispos de Bolivia.
Francisco es el segundo pontífice que llega a Bolivia 27 años después de la visita de Juan Pablo II en 1988.
La gira sudamericana concluirá el domingo en Paraguay.
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