El papa Francisco ha invitado a un grupo de indigentes de Roma a Turín para poder rezar ante la Sábana Santa, que se expone en la ciudad hasta el 24 de junio, confirmó hoy el diario vaticano "L'Osservatore Romano".
El papa Francisco fue el que quiso ofrecer a estos peregrinos sin recursos la posibilidad de participar en este evento, con lo que financió el viaje en dos autobuses de algunas de las personas que a menudo viven y duermen bajo las columnas de la plaza de San Pedro y en los alrededores.
Lo hizo a través de la gestión del limosnero vaticano, Konrad Krajewski, que explicó al diario "La Stampa" que esta iniciativa es "una manera de preparar la visita del papa programada para el 21 de junio: antes que él, llegan sus pobres".
Hoy partió hacia la ciudad italiana el primer grupo formado por 45 peregrinos, mientras que la experiencia será repetida la semana que viene por otro grupo de más de 70 personas, también pagado por los fondos para la caridad de la Iglesia, según el diario.
Se trata de una acción más que se enmarca en la serie de iniciativas impulsadas por Jorge Bergoglio para ayudar a los más necesitados.
Es el caso de la visita de un grupo de sin recursos a la Capilla Sixtina y la posterior cena en los Museos Vaticanos, o la posibilidad de que estas personas dispusieran de asientos reservados en un concierto celebrado en el Vaticano.
También la entrega de 400 sacos de dormir con motivo del 78 cumpleaños del papa, el pasado 18 de diciembre, o la apertura en febrero de tres duchas y una sala de barbería, para garantizar la higiene a estas personas.
"Debemos nutrir a los que están en dificultades no solo con el pan, sino también ofreciéndoles la posibilidad de disfrutar de la belleza o de vivir junto con otros peregrinos momentos importantes" como la visita a la Sábana Santa, afirmó Krajewski.
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