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La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó ayer su satisfacción por la condena en Colombia del autor intelectual en el asesinato, hace 13 años, de Orlando Sierra Hernández, subdirector del diario La Patria de Manizales.
El político Francisco Ferney Tapasco González, ex presidente del Partido Liberal del departamento de Caldas, fue sentenciado el pasado 24 de junio a 36 años de cárcel como instigador del asesinato de Sierra Hernández en febrero de 2002.
La Sala Penal del Tribunal Superior de Manizales, capital departamental, también condenó a los hermanos Fabio y Jorge Hernando López Escobar a 28 años de reclusión como coautores del homicidio; otro acusado fue absuelto, según informó La Patria en su edición de ayer (http://bit.ly/1Hjwxri).
Gustavo Mohme, presidente de la SIP, dijo que “por fin llegó la justicia”, argumentando que se trata de “una gran noticia para celebrar por la memoria de Orlando Sierra, por el sufrimiento de sus familiares, por el honor de los colegas de La Patria y por la justicia de todos los periodistas colombianos asesinados y cuyos casos siguen impunes”.
Por el asesinato también cumplen penas de 28 años de prisión como coautores: Francisco Antonio Quintero Tabares (alias 'Tilín') y Luis Arley Ortiz Orozco (alias 'Pereque'), y se espera además el fallo sobre otro acusado, Gabriel Jaime López Escobar, juzgado de manera separada. Luis Fernando Soto Zapata, autor material del crimen, fue condenado en 2002 a 17 años de prisión, pero al cumplir cinco años de cárcel obtuvo beneficios penales y fue liberado de manera anticipada; murió de manera violenta en 2008.
Por su parte, Juan Francisco Ealy Ortiz, Presidente de la Comisión contra la Impunidad de la SIP y Presidente Ejecutivo y del Consejo de Admnistración de EL UNIVERSAL, expresó que “este caso es una muestra de que para derrotar la impunidad, no podemos darnos por vencidos. Debemos seguir exigiendo la aplicación total de justicia para que todos los participantes y responsables en la ejecución de los crímenes contra periodistas, sean juzgados”.
El 30 de enero de 2002 Sierra Hernández fue herido de gravedad por un sicario cuando regresaba de almorzar junto a su hija; falleció el 1 de febrero. El ataque ocurrió en pleno centro de la ciudad de Manizales. El asesinato del prestigioso periodista consternó a la sociedad local que lo seguía a través de su columna dominical “Punto de Encuentro”, en la que denunciaba la corrupción de los políticos de Caldas.
Su caso representó para la SIP un símbolo de la lucha en contra la impunidad en Colombia. El asesinato fue investigado por la SIP a través de su Unidad de Respuesta Rápida en Colombia —parte de proyecto Impunidad que generosamente apoyaba la Fundación Knight—, que derivó en numerosos reclamos al gobierno, y produjo un documental, “La Batalla del Silencio” (https://www.youtube.com/watch?v=ICRGtBDoruU), que permitió denunciar el crimen.
