El presidente de EU, Barack Obama, destacó hoy que Loretta Lynch, la primera fiscal general afroamericana del país, es "dura" y a la vez "justa" y que no hay "mayor defensor" que ella de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.
Obama encabezó, en el teatro Warner de Washington, la ceremonia formal de investidura de Lynch, quien juró el cargo a finales de abril ante el vicepresidente de EU, Joseph Biden, y hoy volvió a hacerlo ante la jueza Sonia Sotomayor, quien también hizo historia en su día como la primera latina en llegar a la Corte Suprema.
Para el juramento de hoy, Lynch usó una Biblia que perteneció a Frederick Douglass, activista por los derechos de los afroamericanos.
"La ley es su hoja de ruta (...). Ella es dura, pero es justa" , dijo Obama sobre Lynch, que estuvo acompañada de sus padres y su esposo.
El mandatario subrayó, además, que Lynch "entiende la importancia" de la necesidad de fortalecer las relaciones entre la Policía y las minorías negra e hispana, así como de emprender una "reforma" del sistema de justicia penal.
Cuando asumió el cargo a finales de abril, Lynch prometió utilizar la Justicia como "brújula" para luchar contra el cibercrimen, restaurar la confianza entre las fuerzas del orden y las minorías y proteger al país del terrorismo.
Ese diálogo entre las fuerzas del orden y las minorías raciales comenzó con el antecesor de Lynch en el cargo, Eric Holder, y a raíz de varios casos de abuso policial de agentes blancos hacia ciudadanos negros con resultados mortales que han generado tensiones y protestas, en algunos casos violentas, en varios puntos del país.
A sus 55 años, Lynch llegó al Departamento de Justicia avalada por una larga trayectoria como fiscal federal en Brooklyn (Nueva York).