El papa Francisco decidió intensificar su lucha contra los abusos sexuales a menores, al aprobar una propuesta para crear un tribunal que juzgará a los obispos que protejan a sacerdotes pederastas, en la misma jornada en que anunció su nueva encíclica sobre el medio ambiente, Laudato si (Alabado seas).

El Papa “aprobó las propuestas de la Comisión para la Tutela de los Menores y concedió su autorización para que se den respuestas adecuadas a los fines que las mismas persiguen”, dijo el padre Federico Lombardi, director de la sala de prensa vaticana.

La comisión de menores sometió sus iniciativas a la aprobación del grupo de nueve cardenales que ayudan al Papa en la reforma de la Curia (G-9), el cual, luego de aprobarlas por “unanimidad” las hizo llegar al Papa para su autorización definitiva.

La institución de un tribunal ad hoc para los casos de pederastia sacerdotal, que encabezará un arzobispo secretario, es una de las propuestas aprobadas por Francisco, la cual nace en parte como consecuencia del arresto —en septiembre pasado— del ex nuncio en Santo Domingo, monseñor Jozef Wesolowski, quien será procesado en el Vaticano por el delito de abuso a menores.

Convertida en una sección de la Congregación para la Doctrina de la Fe, en la nueva estructura jurídica confluirá la sección disciplinaria de la Congregación, competente en materia de abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia.

Otra de las propuestas aprobadas por el Papa es la del llamado delito canónico de “abuso de oficio episcopal”, que se refiere al comportamiento de los obispos que no dieron un seguimiento adecuado a las denuncias de abusos de clérigos a menores o minusválidos.

Este tipo de denuncias podrán presentarse ante tres congregaciones: la de los Obispos, la de Evangelización de los Pueblos y la de las Iglesias orientales, las cuales examinarán caso por caso y evaluarán si es procedente el envío a juicio de un eventual imputado.

Francesco Peloso, vaticanista del diario Il Secolo XIX, quien acaba de publicar el libro El banco del Papa, dijo a EL UNIVERSAL que la reforma “es sin duda positiva, porque finalmente el Vaticano admite la responsabilidad de los obispos, visto que no sólo es culpable quien abusó de un menor sino también quien lo encubrió o empantanó las investigaciones”.

Sin embargo, para Peloso la reforma es sólo un paso hacia la transparencia, “ahora lo importante es que se apliquen estas normas. En estos seis meses en Italia ha habido 10 arrestos de sacerdotes pederastas y hay muchos obispos que se han comportado mal en estos y otros casos y no ha pasado nada”. Conferencias episcopales como “la de Italia y México no son muy receptivas a este tipo de normativas, no denuncian nada a menos que no sea algo clamoroso. El caso Maciel y algunos en Italia no me dejan mentir”, añadió.

La misma fuente precisó que dentro y fuera del Vaticano se debe registrar este hecho para “presionar a los obispos y autoridades eclesiales a responder a lo que pide el Vaticano, el Papa: que los obispos que hayan incurrido en graves omisiones en este tipo de casos sean denunciados, esta es la gran novedad”.

Por su parte, la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico criticó que la medida no va suficientemente lejos.

La nueva encíclica. “Laudato si. Sobre la protección de la casa común”, es el título elegido por el Papa para su segunda encíclica, en la que hace una defensa del ambiente y de la ecología, según informó la sala de prensa vaticana. El texto será presentado el 18 de junio por el cardenal Peter Turkson, un representante del patriarcado ortodoxo de Constantinopla, Giovanni Zizioulas, y un científico, John Schellenhuber, fundador y director del Potsdam Institute for Climate Impact Research.

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