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Madrid.— El Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy será enjuiciado como responsable civil subsidiario por un presunto delito de fraude fiscal relacionado con el caso que investiga una supuesta financiación ilegal en el seno de la formación conservadora, señaló ayer el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata.
El magistrado reclama al partido gobernante en España una fianza de 1.2 millones de euros, cantidad que se correspondería con la que supuestamente dejó de ingresar al fisco español entre 2007 y 2008, al no haber declarado una serie de donaciones y haber pagado en negro unas obras de reforma realizadas en su sede de Madrid.
También se sentarán en el banquillo de los acusados los ex tesoreros del PP Luis Bárcenas y Álvaro Lapuerta y el ex gerente Cristóbal Páez, a quienes se han impuesto fianzas de entre 7.5 y 9 millones de euros. Están acusados de presuntos delitos de organización criminal, asociación ilícita, falsedad contable, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, delito electoral y delitos contra la Hacienda Pública.
El llamado caso “de los papeles de Bárcenas” investiga una supuesta contabilidad paralela en el PP a partir de las notas manuscritas que el diario El País publicó en enero de 2013 y en las que supuestamente el ex tesorero, que controló durante casi dos décadas las cuentas del PP, recogió pagos en negro y donaciones no declaradas.
De la Mata apunta en el auto hecho público ayer que esa “caja B” del PP “funcionó al menos desde 1990 y hasta 2008” y que se nutrió de “donativos o aportaciones efectuadas por personas relacionadas con entidades beneficiarias de importantes adjudicaciones públicas, al margen de la contabilidad oficial”.
De la Mata, quien sucede en el juzgado número cinco de la Audiencia Nacional al juez Pablo Ruz, instructor del caso, abrió también juicio contra Unifica, el estudio de arquitectura que hizo la reforma de la sede del PP, y contra sus responsables, a los que acusa de presuntos delitos de falsedad documental y contra la Hacienda pública.
La apertura de juicio oral de este caso es otro golpe para la formación conservadora tras los malos resultados obtenidos el pasado domingo en las elecciones municipales y regionales celebradas en España, que han provocado la apertura de una crisis en el partido, que ayer se agudizó con un cruce de reproches entre dirigentes.
Uno de los más duros fue el presidente en funciones del gobierno regional de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, quien tras instar el martes a Rajoy a preguntarse por su idoneidad como candidato del PP ante las elecciones generales previstas a final de año, atacó ayer al ministro de Energía y Turismo, José Manuel Soria, al que culpó de la pérdida de votos del PP en la región por su mala gestión de la crisis minera vivida allí en los últimos años. DPA
