Más Información
rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
Un ducto de agua potable de unos 30 centímetros de diámetro fue roto por constructores de una empresa inmobiliaria que construyen un desarrollo en la barranca de El Huizachal, que fue catalogada como Área Natural Protegida (ANP).
Rubén Velasco Valdez, delegado vecinal de El Huizachal, acompañado por un grupo de colonos, realizó un llamado a las autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua); de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), así como de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem), para frenar y sancionar a quienes provocaron el daño ecológico en la barranca.
Este 4 de julio “escuchamos como se derramaba el agua, como si estuviera lloviendo, pero al voltear hacia la barranca observamos que era un tubo roto, del que se derramaban miles de litros de agua limpia, junto a la maquinaria y cuadrillas de trabajadores de la inmobiliaria”, señalaron los vecinos de la calle Mayor Celedonio Villarreal, que se ubica en el fraccionamiento Lomas del Huizachal.
Durante horas se derramaron miles de litros de agua potable, por lo que llamamos a las autoridades de Naucalpan y de Huixquilucan, de la Comisión Nacional del Agua y de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), afirmó el dirigente vecinal Rubén Velasco.
En la barranca de El Huizachal , un grupo de vecinos señaló el tubo averiado, durante un recorrido que llevó a cabo en el punto EL UNIVERSAL, mientras que en el lugar trabajaba una cuadrilla de empleados de una inmobiliaria, quienes trataban de taponear la fuga de agua, para hacer una reparación de la ruptura, luego de que presuntamente golpearon y dañaron un ducto del que brotaron miles de litros, que presuntamente provienen del sistema Lerma Cutzamala.
EL UNIVERSAL llegó a la barranca de El Huizachal cerca de las 11:00 de la mañana y captó en video la fuga de agua de un ducto.
Cerca de las 11:50 una cuadrilla de trabajadores taponeó el tubo de aproximadamente 30 centímetros de diámetro que corre por la barranca de El Huizachal, declarada Área Natural Protegida por un decreto emitido por el entonces gobernador mexiquense Emilio Chuayffet Chemor, el cual fue publicado en la gaceta de gobierno del Estado de México el 16 de agosto de 1994.
“Nos indigna el derribo de árboles, la excavación que está alterando la barranca de El Huizachal, dañando la flora y la fauna del este nicho ecológico y la falta de acción de las autoridades municipales, estatales y federales , para frenar este daño”, reiteró el delegado vecinal Rubén Velasco.