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En el tianguis de San Juan, uno de los más grandes de la Zona Metropolitana del Valle de México, que se instala los domingos sobre la avenida Texcoco, en el límite del municipio mexiquense de Nezahualcóyotl y la delegación Iztapalapa, no sólo se registran extorsiones contra los vendedores, sino que prolifera la venta de droga, de bebidas alcohólicas, robo a visitantes y cristalazos a los vehículos de los compradores y comerciantes.
Ismael Castillo, subdirector Metropolitano y de Grupos Especiales de la Policía Municipal de Nezahualcóyotl, dijo que además de la operación de la banda de Ejército de Oriente que cobra derecho de piso a los vendedores, hay presencia de otros grupos delictivos integrados por menores de edad —de 12 a 17 años— y de jóvenes de 18 a 28 años, aproximadamente.
Según el diagnóstico de la Dirección de Seguridad Ciudadana Municipal, más de 70% de los miembros de esas organizaciones son jóvenes menores de 20 años.
La mayoría de esos grupos delictivos viven del lado de Iztapalapa y operan en esa franja donde también hay presencia de halcones que vigilan y avisan a sus cómplices cuando detectan a policías.
“Tenemos detenciones por venta de droga en ese tianguis, de piedra y de todo. En un operativo recientemente se hizo el aseguramiento de tres sujetos por venta de droga”, recordó el funcionario.
La corporación de Nezahualcóyotl ha detectado que en esa área opera una banda de jóvenes que se dedica a romper los cristales de los automóviles para sustraer lo que se encuentra en su interior.
“Son grupos específicos que atacan determinado espacio, narcomenudeo; aprovechan esa situación de que le brincan al otro lado, se esconden, aprovechan que no sabemos que puede haber halcones, ven a la policía y se empiezan a mover”, mencionó.
Apenas el domingo pasado se registró una balacera en ese tianguis entre integrantes de dos presuntos grupos de extorsionadores, que dejó un saldo de dos personas muertas y 10 lesionados.
Aun cuando varios de los delincuentes han sido detenidos, desde el penal dirigen acciones en los límites de Iztapalapa y Nezahualcóyotl, dijo Castillo Palacios.
