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emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
El que exista sobrepoblación de más de 200% y hacinamiento en el penal estatal Neza-Bordo aumenta los riesgos de que les ocurra algo a los propios internos, alertó la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem).
“Evidentemente es un factor de peligro porque estamos hablando de uno de los centros preventivos con mayor población. Tiene ese factor de alto riesgo para que se susciten violaciones a los derechos de algunos de los internos, ahí estaríamos hablando de extorsiones, algunos abusos”, dijo Ricardo Vilchis Orozco, visitador general de Supervisión Penitenciaria del organismo mexiquense.
Expuso que como el penal es responsabilidad del gobierno del estado, la falta de supervisión en materia de derechos humanos permite que se realicen este tipo de actos.
Al existir ese tipo de irregularidades en ese reclusorio, el gobierno del Estado de México debería actuar en consecuencia para prevenir, evitar y que se repitan acciones que lesionan las garantías individuales de los internos, dijo.
Consideró que el gobierno estatal incumple con la normatividad para garantizar la estancia de los reclusos, ya que no ha erradicado las anomalías que se registran en el penal, que es uno de los más poblados del sistema carcelario de la entidad.
“En este sentido hay incumplimiento de la norma por los porcentajes de sobrepoblación que se presentan en los centros preventivos”, indicó.
El Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2016, elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), otorgó una calificación de 6.47 puntos en escala de 1 al 10 al penal Nezahualcóyotl Bordo de Xochiaca.
No obstante que el reclusorio tuvo una calificación aprobatoria, el organismo nacional detectó varias inconsistencias en su operación. La más grave es que sobrepasa su capacidad, pues fue diseñado para albergar a mil 716 presos, pero fueron reportados a la CNDH 4 mil 191, lo que significa una sobrepoblación de 244%.
En mayo de este año, a la Codhem las autoridades carcelarias le informaron que 4 mil 115 reos se encontraban en el centro penitenciario, 76 menos que los reportados a la CNDH, pero aún continúan la sobre población.
Hacinamiento, insuficiencia en los programas para la prevención y atención de incidentes violentos, así como en los procedimientos para la remisión de quejas de probables violaciones a los derechos humanos, son otras de las carencias que prevalecen ahí.
EL UNIVERSAL solicitó una entrevista con algún funcionario del gobierno de la entidad mexiquense para hablar sobre el tema, pero no obtuvo respuesta.
