“El Coqueto”
era el microbús que César Armando Librado Legorreta conducía todos los días del paradero de Chapultepec hacia Valle Dorado y en el que abusó sexualmente de ocho mujeres, siete de las cuales asesinó entre el 21 de junio de 2010 y el 18 de enero de 2012.
Durante esos años, el chofer utilizaba a “El Coqueto” para agredir a las pasajeras y tirarlas en el camino, en un radio de tres kilómetros en Tlalnepantla , en su mayoría, pues el cuerpo de una de sus víctimas fue encontrado en la calle de General Primm, en la colonia Juárez de la Ciudad de México.
El microbús, que en el espejo decía "coqueto" en letras rojas, fue el vehículo en el que se cometían los ilícitos, como ocurrió con la combi de la Ruta 40 en Neza, en la cual el chofer José Octavio Sánchez Razio violó y mató a la niña Valeria , de 11 años, el jueves pasado.
Debido a que “El Coqueto” operaba tanto en la Ciudad como en el Estado de México, las dependencias de ambas entidades tuvieron que trabajar para detener al sujeto, quien fue aprehendido el 23 de febrero del 2012 por policías capitalinos , sin embargo cuando fue entregado a las autoridades del Edomex, el feminicida se fugó de la Subprocuraduría Regional de Tlalnepantla.
Cuando fue presentado, "El Coqueto" mostró un tatuaje que decía "América", el nombre de su esposa, a quien le regalaba las pertenencias de sus víctimas.
Ese día, Alfredo Castillo Cervantes, quien era procurador del Edomex, explicó que “El Coqueto” no estaba bajo arraigo y que sus vigilantes se descuidaron. Durante su huída el feminicida se lesionó la espalda y los tobillos.
Librado Legorreta huyó a casa de su hermano, en donde no lo recibieron. Luego con su padre, quien se negó a cuidarlo y darle dinero, pero que lo fue a dejar a casa de su hermana, en La Malinche, en Magdalena Contreras, ahí fue en donde los policías lo detuvieron finalmente, por confesión de su padre, quien no pudo con la presión social.
En esa casa, "El Coqueto" ya no se podía levantar. Estaba en el piso, vendado y sin pantalones.
Las madres de Blanca Elia, Fernanda, Patricia, Eva Cecilia, Dayana, Camila y Fidelia hicieron un frente para presionar a las autoridades y que el feminicida no saliera de la prisión. Pero fue la denuncia de la primera víctima de “El Coqueto”, quien sobrevivió, la que fue determinante para las investigaciones.
“El Coqueto” fue internado en el penal de Barrientos en primera instancia y luego, en marzo de 2014 trasladado al de máxima seguridad en Topo Chico, con una sentencia de 240 años.
cg