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A cinco meses de los actos de rapiña registrados en comercios, supermercados y tiendas departamentales mexiquenses, aún permanecen bajo proceso penal 320 de 410 presuntos saqueadores detenidos; además de que autoridades judiciales establecieron 87 condenas de hasta cinco años ocho meses de prisión y el pago de multas de hasta 102 mil pesos por reparación de daños.
En enero, durante las protestas por el gasolinazo, en las que cientos de ciudadanos y conductores se manifestaron de forma pacífica, otros grupos irrumpieron en tiendas y comercios para saquear mercancía, en hechos registrados entre el 2 y 5 de enero, en municipios como Ecatepec, Tecámac, Acolman, Zumpango, Nicolás Romero, Huehuetoca, Cuautitlán Izcalli, Cuautitlán y Tlalnepantla.
Ante los saqueos, el gobernador Eruviel Ávila Villegas, acompañado de empresarios, el secretario de Gobierno, José Manzur, y el fiscal general de Justicia, Alejandro Jaime Gómez Sánchez, activaron operativos de seguridad y sobre volaron el estado para detectar y detener a quien realizara actos de rapiña.
En la primer semana del año 665 personas fueron detenidas por saqueos a comercios y destrozos a sucursales bancarias y casas de empeño. Del total, 410 ingresaron a penales mexiquenses para ser procesados por los delitos de robo, robo con violencia, motín, daño en bienes y lesiones; sólo quedaron en libertad 160 menores de edad, 140 hombres y 20 jovencitas.
A la fecha, 87 de los detenidos recibieron condenas y multas; 320 continúan bajo proceso, y los tres restantes saldrían libres al no comprobarse su participación directa en los actos de “rapiña”.