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La candidata de Morena al gobierno del Estado de México, Delfina Gómez, arrancó su campaña asegurando no ser “un títere” de Andrés Manuel López Obrador, como la acusó el PAN y ofreció a los mexiquenses programas sociales, atacar la corrupción y no tomar “ni un centavo”.
A sus oponentes dijo: “Hay quienes se han atrevido a faltarme el respeto al decirme títere, pero les digo que tengo muchas… razones para gobernar (…) pero ¿saben qué? los perdono”.
Empero, por las acusaciones recibidas de la dirigencia panista, el coordinador de campaña de Morena, y representante ante el Instituto Nacional Electoral (INE), Horacio Duarte, anticipó que presentará una denuncia por violencia política de género contra su abanderada.
Morena a su vez, inició las acusaciones a los candidatos del PRI, Alfredo del Mazo, y del PAN, Josefina Vázquez Mota, en voz del dirigente nacional. Andrés Manuel López Obrador, quien en el arranque oficial de campaña, en el Teatro Morelos de la capital del estado, los acusó de corruptos.
Las propuestas. Gómez inició proselitismo en Ecatepec, municipio que vive los más altos niveles de feminicidios del estado, en donde ofreció justicia y respeto a las mujeres.
Ahí, Gómez exigió a sus contrincantes respeto, pues no está manipulada y tiene méritos propios, y se lanzó contra sus oponentes que la han minimizado por ser mujer y no tener “linaje”.
Por la tarde, en la capital del estado, con la presencia de legisladores —entre ellos del PRD— Gómez presentó su Decálogo de Ética, que incluye entre sus puntos la integración de un “gobierno plural y profesional”, con el perfil necesario; la presentación obligatoria de la declaración 3de3. Gómez prometió programas sociales y sostuvo que se financiarán con combate a la corrupción. Además se propuso elevar la pensión para adultos mayores de 550 a mil 180 y de forma universal; dar pensión a personas con discapacidad y madres solteras.
