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rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
Naucalpan, Méx.— El alcalde Édgar Olvera ordenó enviar a la Comisión de Honor y Justicia a los cinco policías que participaron en la detención de 10 brigadistas de Poder Antigandalla tras el retiro de objetos que impiden estacionarse en calles públicas del fraccionamiento La Florida y colocar calcomanías en vehículos estacionados sobre las banquetas con el lema “Respeta al peatón” .
El sábado 5 de noviembre los brigadistas retiraron cubetas, sillas, macetas, piedras, botes, troncos y trafitambos, entre otros objetos, que usan vecinos para apartar lugares de estacionamiento e impedir automovilistas se estacionen frente a sus casas, aún cuando no sean entradas a cocheras.
Vecinos de La Florida defendieron su actitud ante la proliferación de comercios que no cuentan con espacios de estacionamiento, por lo que personas ajenas saturan las calles.
Los “antigandallas de Naucalpan vulneraron la seguridad de mis vecinos, por lo que pidieron el apoyo de la policía”, afirmó Felipe Peralta, delegado vecinal del fraccionamiento, al señalar que los afectados son adultos mayores y los brigadistas actuaron como “vándalos”.
Los brigadistas de Poder Antigabndalla, a su vez, documentaron con videos que colocaron las calcomanías a una serie de autos que impedían el paso de peatones sobre las banquetas y que pidieron el apoyo de la policía para detener a quien les reclamó el retiro de sus objetos y los agredió por colocare las calcomanías sobre sus autos, que no eran adultos mayores.
El artículo 87 del Bando Municipal prohíbe colocar objetos que obstruyan la vía pública; no obstante, los únicos facultados para su retiro son los policías, señaló Guillermo Torres, director de comunicación social del ayuntamiento.
La detención propició la intervención de Arne Aus den Ruthen , ex delegado de la Miguel Hidalgo y quién se autodenomina “caza corruptos” y trasmitió en Periscope desde las oficinas del juez calificador de Naucalpan, donde intentó ingresar a galeras y exigió la liberación de los brigadistas.
Alletta, una de las jóvenes detenidas, en entrevista con EL UNIVERSAL, dijo que al ser la única mujer, fue ingresada a una galera diferente a la del resto de los brigadistas en donde permanecieron más de dos horas.
”El sitio olía a orines, ahí estuve junto con una chica que fue contratada como edecán de Telcel, que tampoco era delincuente y fue detenida en ese sitio apestoso” relató con indignación la joven profesionista.
“Sólo hasta que escucharon que venía Arne fue que me llevaron junto con mis compañeros a una oficina”, afirmó.
