El Congreso local autorizó que se otorgue una concesión a una empresa privada para el manejo de la basura en Chimalhuacán porque el relleno sanitario con el que cuenta el gobierno local sólo tiene una vida útil de cuatro años.

La fracción parlamentaria del PRD se opuso a que el ayuntamiento concesione ese servicio porque aseguró que sólo se beneficiará a las empresas ligadas a la organización priísta Antorcha Popular.

La alcaldesa de Chimalhuacán, Rosalba Pineda Ramírez, emanada de esa organización, comentó en conferencia de prensa que el proyecto de concesión de la recolección de basura es un plan que beneficiará a todos los sectores de la población, sin distinciones partidistas o preferencias a grupos sociales.

"Es un asunto que resolverá a largo plazo el problema de acumulación de residuos sólidos, el cual  afecta a nivel estatal", dijo.

La alcaldesa lamentó que grupos políticos se opongan sin fundamentos a un proyecto que resolverá el problema que genera más de 500 toneladas de basura que se recolectan diariamente en los 98 barrios y colonias de la localidad.

“Es falso que tengamos un acuerdo pactado con alguna empresa para ceder esta concesión de recolección de basura. Invitamos de manera respetuosa a los diputados locales que se opusieron a este proyecto a que debatamos sobre las mejores estrategias y alternativas para resolver el problema de acumulación de basura, con ideas claras y con mejores propuestas”, afirmó.

Luego de que los diputados locales aprobaron que se concesione el manejo de los residuos domésticos, el Ayuntamiento llevará a cabo el proceso de licitación.

“Actualmente contamos con cuatro empresas interesadas en participar en la licitación. Uno de los principales requisitos que hemos solicitado es la solvencia financiera; vamos a escuchar todas las propuestas y las analizaremos a fondo para luego emitir la resolución”, anunció.

Según la alcaldesa, al encargarse una empresa privada de esa función el gobierno municipal reducirá los gastos destinados al proceso de recolección de residuos sólidos, como combustible para las unidades, maquinaria para la disposición final de basura, entre otros insumos.

“Confiamos en ahorrar por lo menos un 10% en el consumo de energía eléctrica; la propuesta avalada por el congreso mexiquense nos permitirá mejorar el servicio público que anualmente recolecta más de 181 mil toneladas de desperdicios”, explicó.

Chimalhuacán cuenta con un relleno sanitario que se planeó que durará entre 10 a 12 años, pero el crecimiento demográfico provocó que el tiempo de redujera a cuatro.

A nombre de la bancada perredista en el Congreso mexiquense, la legisladora Juana Bonilla, mostró su oposición a que el gobierno de Chimalhuacán concesionara la recolección de basura.

"Es un grupo que se está enriqueciendo desde una perspectiva grotesca y paramilitar en diversas zonas del Estado de México (Antorcha Popular), es nuestra responsabilidad decir las cosas que se hacen en el estado en contra de la democracia, es el colmo que estamos discutiendo un dictamen en el que se quiere privatizar el servicio de basura", expresó.


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