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Farsay S.A. de C.V. y Saro Infraestructura S.A. de C.V., propiedades de Emir Garduño Montalvo, conocido también como el #LordRollsRoyce, han abandonado el domicilio fiscal que tenían registrado y que utilizaban también para todo tipo de notificaciones, corroboró EL UNIVERSAL durante un recorrido y acceso a los inmuebles.
De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), los bienes de Garduño Montalvo son investigados por presunto lavado de dinero.
El primer inmueble está ubicado en la calle Ignacio Pérez, No. 212, colonia 5 de Mayo, del barrio San Sebastián, donde aún hay rastros de remodelación que dejó Álvaro Sáenz, representante legal de Farsay S.A. de C.V.
El departamento “5” utilizado como oficina está en el segundo piso, al fondo de ese inmueble tipo vecindad. Pagaba 3 mil 200 pesos mensuales de renta y sus finos acabados contrastan con el resto de habitaciones desgastadas y viejas que lo rodean.
“Sí, aquí estuvo rentando el señor Álvaro (Sáenz) casi dos años y ellos remodelaron el apartamento para una constructora. Estacionaban sus coches aquí adentro y de repente se fueron”, narró una de las vecinas de ese lugar de difícil acceso.
Saro S.A. de C.V., representada legalmente por Eugenio Crowley Bolaños, tenía como domicilio fiscal Avenida Benito Juárez 1001 interior 407, San Francisco Cuauxtenco, municipio de Metepec.
Caso contrario a Saro S.A. de C.V, Farsey S.A de C.V. contrató una empresa dedicada a la renta de oficinas físicas y virtuales, que contempla los servicios de domicilio social, comercial y fiscal; asistente ejecutiva, así como atención profesional y personalizada a clientes.
Esta empresa está en el cuarto piso del edificio “Zero”, ubicado en el domicilio antes señalado de esa zona residencial, a menos de un kilómetro de la casa donde vivía #LordRollsRoyce y que fue cateada la noche del miércoles por autoridades estatales.
La Avenida Juárez es la única división que hay entre la puerta principal del lujoso edificio “Zero” y el residencial Club de Golf San Carlos, donde, según vecinos del lugar, tienen propiedades “funcionarios de muy alto nivel”.
Para ingresar al complejo de oficinas se requiere pasar por un filtro de seguridad que culmina con el registro de las huellas digitales de los visitantes; una vez en el elevador todos los ángulos son cubiertos por cámaras de seguridad.
En el cuarto piso se aseguró que si bien Emir Garduño Montalvo frecuentaba esas oficinas, no tenía un espacio físico para la constructora. Su domicilio fiscal sólo era virtual y por ello las autoridades judiciales se vieron impedidas a notificarles, “pues ya no hay quién reciba las notificaciones de los procesos penales que enfrenta”.
