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Guadalupe Martínez Loza inició la queja 974/2015 ante la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) por presunta negligencia en la que habrían incurrido médicos del hospital 57 del IMSS, ubicado en La Quebrada, al diagnosticar mal a su madre, quien finalmente murió.
Martínez Loza relató que el pasado 18 de abril su madre sufrió dolor de abdomen y la llevaron a urgencias del hospital de La Quebrada, donde le dijeron que tuvo un infarto y quedó hospitalizada. La mujer tenía las piernas marmoleadas, frías y moradas.
Agregó que comentó a los médicos que su madre tuvo trombosis hace ocho años. Sin embargo, los doctores insistieron en su diagnóstico de infarto.
"Estoy preocupada porque considero que el diagnóstico que le dieron a mi mamá está equivocado. Le diagnostican que tuvo un infarto, pero los síntomas que yo veo son más bien de una trombosis, ella hace 8 años tuvo una y la trasladaron de forma inmediata al hospital de La Raza, donde la operaron de urgencia y oportunamente, yo le pido a usted un traslado", pidió al "dr. Álvarez".
Martínez Loza incluso se hincó ante el médico, quien le explicó que no podría realizar el traslado, pues la paciente recibía el tratamiento correcto, y la cuestionó: “¿Siquiera tiene usted idea de lo que es una arteria o una vena?”
Martínez Loza contestó: “Doctor, primero que nada a mi no me hable como estúpida. Por supuesto que sé lo que es una arteria y una vena. Soy cirujano dentista y al menos la noción de la anatomía sí la sé, tal como sé, por la historia clínica de mi mamá, que están equivocados en su diagnóstico, que no tuvo un infarto y sí una trombosis. Y que estamos perdiendo tiempo para su atención, por favor solicite el traslado a La Raza”.
Martínez Loza relató que su madre empeoraba rápidamente en el hospital de La Quebrada e incluso personal del nosocomio le insistía que presionara el traslado a la Raza, al cual una doctora accedió, quien solicitó por correo electrónico dicho traslado, aunque no obtuvo respuesta.
“El día lunes (20 de abril), a las 8:00 horas, subí con el Director. No me recibió y entonces fui con el subdirector o jefe de urgencias a solicitar y exigir el traslado a La Raza, me dijo que ellos ya habían hecho una labor titánica toda la noche, ya que habían mandado tres correos solicitando el traslado. Le contesté que mandar tres correos no era una labor titánica, que era urgente su traslado. A las 10:00 me indican que ya estaba listo el traslado, que estuviera lista. La ambulancia salió a las 10:30 hacia La Raza”, detalló.
Añadió que finalmente logró el traslado a La Raza, donde una angióloga le comentó: “Mi hija, tu mamá llegó tarde, tiene daño irreversible en las piernas”.
Expresó que su madre fue regresada a La Quebrada, donde le amputaron las dos piernas. De ahí la trasladaron al hospital 72 del IMSS, en Tlalnepantla, donde durante dos horas aguardó en una ambulancia y posteriormente estuvo dos días internada, y la salud de su madre empeoró, por lo que la trasladan nuevamente a La Raza.
En La Raza le explicaron que luego de la amputación su madre no debió ser vendada, además de que los puntos estaban apretados. La mujer murió a las 2:30 horas del pasado 30 de abril.
“Me hinqué ante el médico porque sabía que estaba equivocado”, dijo.
Concluyó: “Todos (en el hospital de La Quebrada) sabían que algo estaba mal, pero nadie hacía nada”.
Martínez Loza afirmó que iniciará una denuncia penal por la presunta negligencia médica.
La mujer, junto con Diego Muñoz Lesser, cuya madre también murió en el hospital de La Quebrada, y familiares de otros pacientes del hospital, integraron un frente común para evitar que continúen presuntas negligencias médicas en el sitio.