Más Información
emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
Chimalhuacán, Méx.— El ayuntamiento de Chimalhuacán aprobó la construcción de un albergue que será utilizado por personas que tengan familiares internados en algún hospital del municipio, pues en las clínicas públicas no se permite que los parientes estén cerca de su paciente.
Será el primer albergue que funcione para esos fines en la zona oriente del Valle de México, donde un gran porcentaje de la población no tiene seguridad social.
En sesión ordinaria de Cabildo, los ediles aprobaron la edificación del albergue, que se pretende ubicar en las inmediaciones del Hospital General de Chimalhuacán, conocido como “90 camas”, o el Hospital Materno Infantil Vicente Guerrero también conocido como “60 camas”.
El alcalde, Sergio Díaz, informó que para la realización del albergue se utilizarán recursos gestionados ante el gobierno del Estado de México, los cuales entregará la recién creada Secretaría de Infraestructura.
El edil explicó que para la construcción del inmueble es necesario un terreno con una superficie de 300 metros cuadrados, el cual se acondicionarán con servicios de hospedaje temporal para que puedan pernoctar, asearse y descansar los familiares de un paciente internado en hospitales del municipio.
La dirección de Desarrollo Urbano municipal ya está revisando las áreas de donación con las que cuenta el municipio para que el terreno cumpla con las características que exige la Secretaría de Obra Pública estatal.
“Desde hace 15 años, los gobiernos municipales del Nuevo Chimalhuacán están ocupados en brindar una mejor atención médica a un millón de chimalhuacanos”, explicó.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) sobre la situación de pobreza y rezago social en Chimalhuacán, en el 2010 la población total era de 614 mil 453 habitantes, de los cuales 48.4% no tienen acceso a seguridad social.
De acuerdo al ultimo informe, significa que 201 mil 935 personas no cuentan con servicios de salud.
Actualmente en esa localidad del oriente mexiquense, que fue considerada durante el sexenio del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, como el municipio urbano más marginado del país, cuenta con 47 unidades médicas.
