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Los golpes que recibió Luis Adrián en la cabeza, el jueves pasado, le causaron muerte cerebral. Un día después del enfrentamiento en el predio Villa Centauro del Norte, en La Polvorilla, Iztapalapa, médicos del Hospital Balbuena avisaron a María Elena López que su hijo de 24 años ya no despertará.
Aunque el corazón de Adrián aún late, Elena sabe que podría perder a su hijo en cualquier momento y todo por la golpiza que le dieron integrantes del Frente Popular Francisco Villa México Siglo XXI.
“Pedimos justicia, que esto no quede impune”, expresó la mujer de 56 años, quien aseguró que antes de ser desalojados de la que fue su casa por 10 años, fueron amenazados y extorsionados por el líder de la organización, Eduardo Navarro.
El día de la agresión, Elena —quien tiene una prótesis en la pierna derecha— se refugió en una casa junto con otros vecinos, por lo que no fue lesionada.
“Cuando vimos que venían las mujeres y hombres aventando balazos, petardos, piedras y venían golpeando a la gente con tubos, un grupo de personas nos metimos a una casa que es la única que tiene loza. No pudieron entrar y desde ahí vimos que hombres sacaban a mujeres arrastrando, las pateaban y golpeaban”, recordó.
Luis Adrián Aguilar López permaneció en su casa, “defendiendo lo que nosotros consideramos nuestro patrimonio, porque ahí vivimos diez años”.
Adrián recibió golpes, tubazos y pedradas en la cabeza. “Eso fue lo que le causó un derrame cerebral, tenía o tiene mucha sangre en el cerebro”.
De acuerdo con Elena, los agresores no sólo los desalojaron sino que saquearon las viviendas, “a mi me robaron 5 mil pesos de una tanda”.
Por estas agresiones, la esposa de Adrián levantó una denuncia en la agencia del Ministerio Público número 44, que está en Cabeza de Juárez, por los delitos de agresiones, despojo y homicidio.
Según Elena, los policías que se presentaron al predio sólo detuvieron a tres presuntos responsables y el resto sigue libre.
Al predio situado en la calle Benito Juárez llegaron Elena y su familia hace 10 años: “Nos invitaron a vivir ahí, nos dijeron que nos darían un terreno de 110 metros, pero teníamos que juntar 15 mil pesos, luego dijeron 30 mil, 50 mil, 70 mil”.
En ese periodo de tiempo, Elena entregó alrededor de 30 mil pesos, en abonos semanales de 100 o 200 pesos, “llegué a dar mil pesos mensuales porque yo sí quería mi casa y terreno”.
Para permanecer en el sitio, debían ser parte de la organización Frente Popular Francisco Villa, pero decidieron salirse “porque ya eran muchas extorsiones. Teníamos que ir a marchas y si no teníamos que pagar 300 pesos. Nos obligaban a ser parte de la organización”.
