Integrantes del Frente Popular Francisco Villa (FPFV) se deslindaron de los actos violentos ocurridos la tarde del jueves en el predio conocido como “Villa Centauro del Norte”, localizado en la avenida Benito Juárez y la primera cerrada de Benito Juárez, en la colonia La Polvorilla, delegación Iztapalapa.
"En la Ciudad de México hay más de 2 mil 500 organizaciones sociales y en ese contexto en ocasiones se confunden los nombres de las agrupaciones. Es muy lamentable que tengamos que aclarar esta situación, pero quiero precisar que el Frente Popular Francisco Villa no tiene nada que ver con los hechos violentos ocurridos el día de ayer en la delegación Iztapalapa", explicó Alejandro López, miembro de la Coordinación Política Nacional del FPFV.
En entrevista con EL UNIVERSAL, mencionó que los hechos los debe investigar la autoridad correspondiente, "son hechos que se tienen que fincar responsabilidades a quienes sean responsables. Eso es lo que nosotros pedimos y que la autoridad sea precisa en cuanto a señalar responsables y no se confundan las siglas".
Dijo que los que forman parte del Frente Popular se sienten ofendidos y lastimados "porque hubo medios que señalaron a la organización y no precisan qué implica un acto como el de ayer".
En su defensa también habló Raúl Flores, presidente del PRD de la Ciudad de México, quien aseguró que "el Frente Popular Francisco Villa, esta dirección Política, utiliza métodos absolutamente políticos de diálogo para lo que ellos emprenden".
Y reiteró que "no es la misma organización que el día de ayer asaltó de manera arbitraria un predio que estaba habitado por la propia gente y que en principio fueron rechazados por la propia comunidad que ahí está asentada".
Habitantes del predio “Villa Centauro del Norte” que fueron desalojados comentaron que algunos de sus vecinos permanecen hospitalizados con un diagnóstico severo a causa de las lesiones que sufrieron, la mayoría, en la cabeza.
Alma señaló al grupo de "Los Dorados de Villa" como los responsables de las agresiones contra mujeres, niños y hombres.
"Entraron armados con pistolas y machetes. A los niños los sacaron en calzones y encañonados. A una persona le dieron un machetazo en la mano. A mí me dispararon pero la bala no me dio. Fue terrible. Le dieron como 23 'tubazos' en la cabeza a un hombre. Ellos no llegaron a dialogar, llegaron a agredirnos", recordó.
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