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Con motivo de la visita del papa Francisco a la Basílica de Guadalupe, el gobierno capitalino y la delegación Gustavo A. Madero desplegarán un operativo de seguridad en un perímetro cerrado de Avenida de los Insurgentes Norte a Eduardo Molina y desde Circuito Interior hasta Cantera.
Al respecto el asambleísta Paulo César Martínez, de Morena, advirtió que los habitantes de la citada demarcación no cuentan con información sobre cuáles serán las vías de acceso a sus casas.
Opinó además que dada la afectación que sufrirán los miles de establecimientos de ese perímetro, el gobierno local debería de establecer una bolsa para resarcir, cuando menos en parte, las pérdidas que tendrán dichos locales comerciales.
Martínez López dijo que residentes de las colonias aledañas a la Basílica solicitaron apoyo ante el cierre de los negocios del lugar, durante los días que durará el operativo de seguridad en ese perímetro.
“Los vecinos no podrán tener acceso en automóvil, a menos que cuenten con un tarjetón que la delegación se comprometió a repartir casa por casa; sin embargo, aún no les ha sido entregado”, mencionó el integrante de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Quienes utilizan el transporte público, en tanto, deberán desplazarse a mayor distancia, pues estarán cerradas ocho estaciones del Sistema de Transporte Colectivo Metro. Además de que en esta área se encuentran diversas clínicas, a las que será difícil el acceso.
msl
