El predio de Altavista 111, en la zona de Santa Fe, quedó totalmente libre de construcciones, luego de los trabajos realizados para demoler un par de inmuebles clasificados como de alto riesgo tras una serie de deslaves en octubre y noviembre pasados.
Las obras de demolición de una casa y un edificio de cuatro pisos concluyeron hace casi un mes y la semana pasada una máquina aplanó el terreno, informó el vecino del residencial Vista del Campo, Juan Rivero.
Dicho condominio colinda con el talud desgajado, del cual un par de trabajadores de la empresa TGC retiran piedras y arena con ayuda de un sistema de rapel, según se observó en un recorrido.
Los inmuebles removidos eran propiedad de Arturo Rosette y su familia.
En el recorrido se observó que también se reanudó la obra de un conjunto de departamentos en el predio contiguo de Tamaulipas 250.
ADVIERTEN DE DRENAJE PLUVIAL
El vecino Juan Rivero informó que un perito en arquitectura de la procuraduría capitalina recorrió el condominio esta mañana y según las observaciones del experto, advirtió que será necesario prevenir las filtraciones de agua en el predio demolido, pues afectarían al resto del condominio.
Por eso dijo que será necesario algún sistema de canalización de agua que tendrán que financiar los vecinos de Vista del Campo.
Afirmó que ampliará su denuncia relativa a los deslaves para pedir que se indague una posible responsabilidad del consejo de administración del residencial en el tema.
ahc