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Los golpes y las extorsiones, de parte del personal seguridad y custodia y de otros presos, son las principales quejas interpuestas por reos ante la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF).
De acuerdo con estadísticas del organismo autónomo, durante 2014 se iniciaron 2 mil 376 expedientes relacionados con presuntas violaciones a derechos humanos de la población carcelaria.
Del total de denuncias presentadas, 24% hablan de golpes y/o extorsiones. Los peticionarios y peticionarias responsabilizaron de estos actos a sus compañeros presos y a personal de seguridad.
Mientras que 20% de presidiarios se quejó de la falta de atención médica. A esto le siguieron los reportes por el temor que viven a diario los reos de sufrir alguna agresión; 19% denunció esta situación.
El resto de las quejas se debieron a castigos injustificados, falta de información sobre la situación jurídica del peticionario y negligencia.
Al ser entrevistada sobre este tema, la directora de la Asociación Civil Modernizando el Sistema Penitenciario, Olivia Garza, señaló que esto se debe a la falta de capacitación del personal en general en materia de derechos humanos.
“Lamentablemente aún permea el precepto de que las personas privadas de su libertad pierden todos los derechos al ser encarceladas, sin embargo, lo que pierden son sus derechos políticos pero nunca sus derechos humanos”, mencionó.
La ex presidenta de la Comisión Especial de Reclusorios de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) se refirió a la urgencia de revisar los historiales del personal de seguridad y custodia, teniendo en cuenta sus antecedentes y número de acusaciones, ya que a su consideración ellos son los principales responsables de los abusos que se cometen en una prisión.
