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Avanzar sobre la Calzada de Tlalpan en sus dos direcciones, es un martirio para los automovilistas que cada día deben circular por esa vía.
Hasta por media hora aumenta el tiempo de traslado de los automovilistas que circulan sobre Tlalpan, debido a las adecuaciones viales que la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) realiza en el Circuito Interior.
Desde la estación Registro Federal del Tren Ligero en la colonia Espartaco, delegación Coyoacán, el tráfico de la calzada de Tlalpan en sentido sur-norte aumenta de manera considerable, los vehículos van a vuelta de rueda.
“Es mejor andar en el metro, porque desde hace un mes aquí es imposible circular y sólo es hasta Ermita, de ahí la circulación se tranquiliza”, dice Irma, quien toma el transporte público para llegar a la estación del Metro General Anaya, de la línea 2.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL se observó que la zona de construcción se convierte en un embudo para los conductores debido a la disminución de cuatro a dos carriles, lo que genera una fila de más de 4.9 kilómetros de vehículos.
“En este tramito hacemos mucho tiempo, normalmente se avanza en menos de 30 minutos cuando hay tráfico, pero ahora es casi una hora”, dijo Estaban, conductor de automovil que avanza de la delegación Tlalpan hacía la colonia Centro.
Desde el mes de octubre, personal de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) se instaló en la zona para colocar un total de 28 tabletas de 50 toneladas de peso y una longitud de 12.5 por 3.8 metros de ancho, que serán el soporte para los nuevos carriles laterales de la Calzada de Tlalpan, con Churubusco.
En el lugar hay presencia de policías de transito, quienes supervisan que ningún peatón sea arrollado pero tienen que esquivar a los vehículos, pues no cuentan con un espacio para poder realizar su trabajo.
Los retornos de salida y entrada a la calzada de Tlalpan sobre Churubusco, están completamente cerrados para la circulación, por lo que los automovilistas tienen buscar alguna vía alterna para poder ingresar o salir del circuito interior, por lo que algunas calles también se vuelven complicadas para la circulación.