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david.fuentes@eluniversal.com.mx
La tapa de una coladera que fue robada hace seis meses y que se había reportado a las autoridades capitalinas, provocó la muerte del bebé Leonardo Daniel, de apenas cinco meses de edad, cuando, según sus familiares, un vehículo desconocido impactó la carriola en la que iba y terminó en el hoyo que está sobre la avenida Ignacio Zaragoza.
La abuela del menor explicó en entrevista al UNIVERSAL que la madre del menor, Diana, de apenas 20 años de edad, salió a encontrarse con ella en el cruce de la avenida Zaragoza y canal de Churubusco donde la señora Rocío Saavedra de 56 años de edad, pide limosnas en silla de ruedas.
Según la mujer, Diana salió con su nieto poco después del mediodía a visitarla para llevarle de comer, en el trayecto un vehículo que pasó a exceso de velocidad impactó la carriola, esto provocó que el bebé saliera volando y cayera justamente dentro de la coladera perteneciente al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX), la cual a decir de los reportes de vecinos, tenía seis meses que la habían robado y a pesar de los reclamos nunca atendieron el llamado.
EL UNIVERSAL publicó el pasado 3 de octubre que durante los primeros 7 meses de 2015 el GDF recibió 367 reportes de desaparición de accesorios de drenaje en la capital. Iztapalapa es la segunda delegación donde existe el mayor robo de coladeras.
Al momento del accidente, de inmediato familiares y testigos reportaron el accidente a los teléfonos de emergencia, estos tardaron más de media hora en llegar, por lo que le pidieron ayuda a un tío del menor, quien trabaja limpiando parabrisas a unos metros de distancia, Luis Enrique, el tío, como pudo intenté meterse a la coladera, consiguió una cuerda de poco más de cinco metros y se ató a ella.
Dentro de la alcantarilla, Luis Enrique se dio cuenta que tenía como 10 metros de profundidad y no pudo llegar al fondo para rescatar a su sobrino, el cual fue encontrado 30 metros más adelante del punto donde cayó de manera accidental, “sentí mucha impotencia, yo hice todo lo que estaba a mi alcance, en mis manos, pero no fue posible, no llegué con la cuerda que me dieron porque estaba muy profundo, de verdad hice todo lo que pude pero no pude hacer nada”, lamentó.
La abuela del menor refiere que toda la familia es de escasos recursos, todos son limosneros y trabajan en las calles para poder sobrevivir por lo que ni si quiera tienen para los gastos fúnebres, “mi hija salió a ver cómo me había ido en el día, cuando me di cuenta ella estaba gritando, lo que vi es que ella estaba junto a la coladera y la carriola estaba destrozada”.
“Aquí hay una cámara de seguridad y pido a las autoridades que revisen esa y que además se hagan responsable de los gastos, porque si atendieran a tiempo la coladera esto no pasara, ahora a quién culpamos o quién se hará responsable”, exigió la abuela.
En este sentido, la Procuraduría General del Distrito Federal dio a conocer que inició una averiguación previa SFIZG/IZC1T3/1325/15-11, en la cual, la madre del menor Diana, refirió que al trasladarlo por la banqueta sobre Río Churubusco esquina con Avenida Zaragoza, la carreola se atoró y al tratar de hacer maniobras, el niño cayó a la coladera. El bebé fue trasladado aún con vida a un hospital pediátrico de Iztacalco dónde ingresó a las 13:30 horas y falleció a las 14 horas.