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Fue sentada comiendo quesadillas que Ana Guadalupe “N” soltó el comentario irónico, que por error la convirtió en La Mataperros.
Según la procuraduría capitalina, la mujer es la presunta responsable del envenenamiento y muerte de 19 canes en el Parque México, de la colonia Condesa. A pesar de las acusaciones en su contra, la mujer asegura que jamás haría daño a un ser vivo.
Es bajo la ética de su profesión como química egresada de la UNAM, que la adulta mayor —tiene 63 años— rechaza su responsabilidad por la violenta muerte de los animales.
“Nunca he cometido un delito porque seguimos la ética de Einstein: Utiliza tus conocimientos para el bien de la humanidad, jamás me acerqué a la Condesa”, menciona.
Ella narra los hechos de forma diferente. Tras convertirse en La Mataperros, ahora sus vecinos le temen. Fue después de varios encuentros desagradables con el perro de una vecina que el pánico, asegura, la llevó a reaccionar por impulso y a soltar el comentario por error.
“Estaba en un puesto de quesadillas sobre la calle Juan de la Barrera esquina con Pachuca. Ahí se me acercó una joven con su mascota de gran tamaño, era un doberman, me parece”.
Ana Guadalupe cuenta que ella sólo quería comer sus quesadillas en paz. No se sentía a gusto con el can olfateando entre sus piernas. Dice que el perro de la joven la hizo recordar al afgano de su vecina, ese que le da miedo porque asoma la cabeza entre los barrotes de la casa contigua y se acerca lo suficiente para ladrar y amaga con soltar una mordida.
Fue ahí, después de pedirle a la joven dos veces que “por favor” alejara a su perro, cuando la mujer de la tercera edad se molestó. “Le dije: por eso están matando perros en la Condesa, porque ustedes no entienden. No vaya a ser que este perro también amanezca muerto. Sí cometí el error de decir eso, pero lo dije para que me dejara, porque ya estaba muy estresada por la presencia del perro”, cuenta.
Ayer, poco antes de las 7:00 de la mañana, peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) y un Ministerio Público de la delegación Cuauhtémoc cercaron el domicilio de Ana Guadalupe para catear su vivienda.
Luego de tres horas de revisar su casa, la mujer aseguró que ella no es culpable del envenenamiento de los animales. Exigió, además, que las autoridades analicen detalladamente los videos de las cámaras.
Después del cateo realizado en la casa de la señora Ana Guadalupe, la PGJDF aseguró que en la diligencia obtuvo varios productos. Entre ellos dos sobres de color amarillo, con la leyeda “raticida”. También mencionaron que se encontraron dos memorias USB con grabaciones de la calle aledaña al Parque México, las cuales serán examinadas por la policía cibernética. Los productos hallados en el domicilio serán analizados e integrados a la investigación.