Autoridades de la delegación Tláhuac informaron que se requieren alrededor de 7 millones de pesos para saldar las deudas de horas extra y guardias, así como para pagar las que se realizarán el resto del año.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Anselmo Peña Collazo, director general de Administración delegacional, dijo que se pagó, aproximadamente, dos millones de pesos a los trabajadores que realizaron horas extra y guardias la quincena 16, que corresponde al mes de agosto, pero el recurso ya no alcanzó para pagar la quincena número 17.

"Para pagar estos adeudos y salir lo que resta del año, octubre, noviembre y diciembre, se requieren alrededor de 7 millones de pesos. No es mucho dinero lo que se requiere, pero para la delegación sí porque no tiene de dónde obtener el presupuesto para continuar con los pagos de tiempo extra y guardia", mencionó.

Indicó que las quincenas 17 y 18, que son del mes de septiembre, están pendientes porque faltan recursos: "Se debe de septiembre en adelante, todavía nos dejaron esas deudas la administración anterior".

El funcionario también denunció el despilfarro de la administración pasada, ya que no dejaron el suficiente presupuesto para el último trimestre de este año y "en la mayoría de las delegaciones hay crisis porque ya no hay recursos para pagar estos conceptos de gasto".

A consideración de Peña Collazo, los sindicatos están presionando a las delegaciones porque creen que están deteniendo los pagos, "cuando en realidad encontramos la administración con recursos que eran para todo el año ya los ejercieron".

De acuerdo con el director, esta situación podría tardar en solucionarse debido a que  las demarcaciones no tienen autonomía financiera, sino que dependen de los recursos que les autorice la Secretaría de Finanzas y la Oficialía Mayor del Gobierno del Distrito Federal.

En su edición impresa de hoy, este diario publicó que la falta de pago de horas extra motivó que decenas de trabajadores de al menos cinco delegaciones protestaran, cerrarán vialidades y obstaculizar el paso de personal que sí deseaba trabajar. Sindicalizados de Cuauhtémoc, Coyoacán, Iztacalco, Tláhuac y Benito Juárez amenazaron con no regresar a sus labores si no les ofrecían una solución.

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