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Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) realizaron un operativo en las instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro para evitar que comerciantes ambulantes y los llamados vagoneros continúen vendiendo su mercancía.
Las revisiones son exhaustivas en las estaciones Cuatro Caminos, Chabacano, Taxqueña, Hidalgo, Zaragoza y Garibaldi entre otras, donde según las autoridades, adquieren los productos que después venden.
En el operativo participan mil elementos de la SSPDF y 500 de la Policía Bancaria e Industrial (PBI), así como 150 vigilantes del área de seguridad institucional, quienes además de retirar vagoneros, refuerzan el área de torniquetes para impedir su acceso.
Aunado a esto se hacen revisiones aleatorias a quienes intentan ingresar con mochilas o maletas para asegurar que ni un solo producto ingrese.
Esta vigilancia arrancó desde que el Metro empezó a brindar servicios, en las estaciones Pantitlán, de las Líneas 1, 5, 9 y A, así como en Chabacano, en sus correspondencias con Líneas 2, 8 y 9; Hidalgo, de las Líneas 2 y 3; Pino Suárez, que interconecta la 1 y la 2; también en las estaciones de la Línea 1, Candelaria y Zaragoza; en Línea 2, Ermita, San Antonio Abad, Zócalo y Panteones; Indios Verdes, de la Línea 3 y Constitución de 1917 y Coyuya, de la Línea 8.
Hasta la tarde de ayer se habían reportado 200 detenidos y cuatro conatos de enfrentamientos que fueron controlados a tiempo. Los detenidos, incluidos vendedores de discos “piratas” fueron puestos a disposición del Juzgado Cívico o Ministerio Público, según el caso.
Sin embargo, quienes son remitidos al Juzgado Cívico tienen la opción de pagar multas de 600 pesos en promedio o cumplir con 36 horas de arresto, por lo que la presencia policiaca será permanente hasta que se logren controlar o en el último de los casos, hasta que se llegue a un acuerdo con los líderes de estas organizaciones.
“Vivimos de esto”. Los vagoneros, por su parte, aseguran que con estos operativos las autoridades acaban con su única fuente empleo y el sustento de la familia. Aseguran que todos trabajan en el Metro, desde la esposa hasta los niños. Explican que han rechazado las becas y ofertas laborales que brinda el gobierno capitalino porque “no alcanza para nada”.
Joaquín —como pidió ser identificado— habló sobre esta situación. Explica que él, su esposa y sus hijos de 12 y ocho años ayudan al sustento familiar. Todos se coordinan para que durante el día puedan vender chicles, cacahuates y música por las tardes. Aseguran que de esta manera pueden salir adelante, pues ni uno de ellos tiene estudios ni empleo seguro.
“No hacemos nada malo, ¿qué quieren entonces? ¿qué nos vayamos a robar o que andemos de delincuentes para llevar la comida a la casa? La ayuda que el gobierno nos iba a dar no alcanza para nada, son casi 2 mil pesos al mes, tú dime, ni para la renta alcanza eso. Chambeando aquí sacamos lo doble aunque no tengamos descanso”.