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De las personas que viven en la capital, 72% se siente inseguro al cruzar la calle, y el 92% asegura que la ciudad es “difícil” de caminar debido a obstáculos urbanos, de acuerdo con una encuesta realizada por el Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos (CEMCA).

Datos de este centro indican que una de cada diez personas ha sido atropellada y dos de cada diez han tenido accidentes de banqueta que les han dejado lesiones.

A través de un video informativo en el que participan CEMCA, la Liga Peatonal, Camina, ITDP, Bicitekas y la Embajada de Francia en México, se busca eliminar la creencia de que el peaton no tiene cultura vial, para analizar que la capital tiene una mala infraestructura, pues la vida urbana está pensada en torno al automóvil, y sólo 30% de la población lo utiliza como medio de transporte.

Como parte del Día Internacional del Peatón, que se celebra este lunes, dichas organizaciones lanzaron el video “La negación del peatón”, con el que hacen un llamado a las autoridades para cambiar la forma en la que se ve la ciudad de México, poniendo énfasis en la urgencia de crear entornos seguros para los ciudadanos.

“Torear a los automóviles se ha vuelto una estrategia de los ciudadanos para defenderse de un entorno hostil, porque ahora, al caminar por las calles, hay que fijarse de automóviles, motos, del Metrobús y hasta de bicicletas”, señala Ruth Pérez, investigadora de CEMCA y secretaria del Consejo Directivo de Bicitekas A. C.

La configuración espacial está poco adaptada a las necesidades del peatón. Las vías rápidas puentes vehiculares, segundos pisos, áreas de estacionamiento han puesto en riesgo la seguridad de los ciudadanos. “Se culpa al peaton por asumir conductas de riesgo sin cuestionar qué es lo que lo está generando”, dijo.

Yazmín Viramontes, coordinadora del Programa de Diseño de Calles de ITDP, señala que para mejorar las condiciones en las que la gente circula en la ciudad se tienen que atender tres principios: primero, reducir velocidad en vehículos motorizados; segundo, la accesibilidad, que se tiene que garantizar de inicio al final del trayecto; y en tercer lugar el ordenamiento de la ciudad, para crear certidumbre por donde se camina.

Al año hay alrededor de 400 mil accidentes viales. En la ciudad de México hay cerca de 100 cruceros peligrosos, modificar la infraestructura urbana podría reducir los accidentes de tránsito y mejorar la calidad de vida, explicó Yazmín Viramontes.

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