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El coordinador de Asuntos Internacionales del gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas viajó a la ciudad del Vaticano para participar en el coloquio “Esclavitud Moderna y Cambio Climático: El Compromiso de las Ciudades”.
Dicho encuentro, organizado por la Pontificia Academia de las Ciencias, convoca a más de 50 ciudades y representantes de diversas ciudades del mundo para dialogar sobre medio ambiente y trata de personas.
El gobierno capitalino informó que Cuauhtémoc Cárdenas participó ayer en la discusión sobre los temas de esclavitud moderna, pobreza, subdesarrollo y exclusión, además de compartir la experiencia de la actual administración en el combate al Cambio Climático.
Precisó que uno de los objetivos del coloquio es intercambiar puntos de vista y experiencias exitosas en torno a las formas para combatir la esclavitud moderna, a efecto de desarrollar programas que hagan frente al trabajo forzado, la prostitución y el tráfico de órganos.
El coloquio, al cual se tiene programada la asistencia del Papa Francisco para la firma del documento final, se realiza en el Casina Pio IV en el Vaticano.
Al encuentro fueron convocados alcaldes de ciudades de todo el mundo entre ellas de Roma, París, Nueva York, Bogotá, Madrid, Vancouver y la ciudad de México, por la cual participa Cuauhtémoc Cárdenas en representación del jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera.
El gobierno del Distrito Federal señaló que al término del coloquio se contempla que las ciudades invitadas lleguen a acuerdos para reforzar sus capacidades de resiliencia ante los impactos del Cambio Climático, los desafíos económicos, sociales y medioambientales.
Agregó que “en el marco de esta gira de trabajo, se desarrollará, este miércoles, el Simposio Sobre Ciudades y Desarrollo Sostenible”.
La Pontificia Academia de las Ciencias destacó que el principal objetivo de esta reunión es que los alcaldes se unan a la petición de los líderes religiosos, para que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considere la esclavitud moderna y la trata de personas como un delito que lastima, vulnera y es un flagelo que enfrente actualmente la humanidad.
Además de “ejercer presión” para que dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que serán aprobados por la ONU en septiembre de este año y en la vigésima primera Conferencia de las Partes de París (COP21) programada para diciembre, se asigne “un peso suficiente a estas dos urgencias dramáticas”.
