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Atado con una soga al cuello y un balazo en la sien encontraron el cuerpo de Julio Manuel de Caso González, secretario de Finanzas del Partido de la Revolución Democrática del Distrito Federal (PRD-DF). El procurador capitalino, Rodolfo Ríos, adelantó que el caso se perfila como un presunto suicidio.
Más tarde, peritos de la dependencia explicaron que la forma en que encontraron el cuerpo se configura como un “aseguramiento de suicidio”, es decir, que la persona recurre a dos vías para garantizar su muerte.
La madrugada de ayer jueves el cuerpo de Caso González fue hallado sin vida en la azotea del edificio, donde están sus oficinas, ubicado en la calle Tonalá 210 de la colonia Roma Sur. Estaba amarrado del cuello, con un pie sobre una silla, un balazo en la cabeza y había una pistola en el suelo.
Los reportes policiales indican que el cadáver fue descubierto por el vigilante del inmueble en las oficinas del Comité Ejecutivo Estatal del partido, luego de que escuchó una detonación de arma de fuego, por lo que se percató que Julio Manuel de Caso González no estaba en su oficina, sino en la azotea.
Al ver la escena, el encargado de seguridad dio parte a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), por lo que uniformados acudieron al lugar para tomar conocimiento de los hechos y resguardar el área hasta que personal de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) acudió a realizar el levantamiento del cuerpo.
Peritos de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en Cuauhtémoc se presentaron al lugar para tomar conocimiento de los hechos; hallaron el cuerpo del occiso colgado en una escalera de la azotea del edificio y con un disparo de arma de fuego 9 mm en la sien.
Autoridades ministeriales informaron que de acuerdo con las características podría tratarse de un “aseguramiento de suicidio”, no obstante continúan las investigaciones ya que se observaron algunas inconsistencias.
Una de ellas, y la que más llamó la atención, es que la soga alrededor del cuello de quien durante la administración pasada fue director de las Comunidades Adolescentes del Sistema Penitenciario Capitalino no tenía la suficiente presión como para ahorcar.
Entre los exámenes que se realizan están la del rodizonato de sodio para determinar científicamente si efectivamente él detonó el arma con la que se quitó la vida, además de que se hacen otras pruebas, como la de cronotanatodiagnóstico, para establecer el momento justo en que murió.
Así mismo, la PGJDF analiza las finanzas del sol azteca para descartar que una posible fuga de dinero fuera el detonante que motivó el aparente suicidio. De igual manera, la dependencia se entrevista con el círculo familiar de la víctima, para conocer si Julio Manuel tenía problemas de salud, si padecía algún grado de depresión y/o consumía algún medicamento.
Con base en las primeras declaraciones de sus familiares, destaca que durante los últimos meses Julio Manuel de Caso González había agudizado un problema estomacal que tenía y que incluso había perdido peso, lo cual se le reveló desde antes de que iniciaran las campañas electorales. “Estaba sometido a una fuerte presión” de parte de los dirigentes del partido, pues había días en los que no llegaba a dormir “por ajustar números”, se dijo.
Algunos empleados cercanos del occiso revelaron que durante la semana se había mostrado distante. En la escena del crimen no se encontró alguna carta póstuma.
