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Afectaciones a la red hidráulica y las maniobras de estabilización del terreno impidieron que 45 familias pudieran volver de inmediato a sus casas luego del hundimiento de una vivienda en la colonia Barrio Norte, en la delegación Álvaro Obregón.
El director de Protección Civil y Zonas de Alto Riesgo de la delegación, Jorge Reyes De la Rosa, estimó que será hasta en un par de semanas cuando las familias, que habitan unas 15 viviendas, puedan volver a estos inmuebles.
El pasado 22 de mayo, una vivienda situada en avenida Juárez 52 se hundió más de un metro y se presumía que estaba asentada sobre una antigua mina. Además se procedió a desalojar las viviendas aledañas ante un posible riesgo de más hundimientos en el área.
La delegación concluyó la semana pasada la demolición de la casa debido a que representaba un alto riesgo; se realizaron estudios de geofísica y se procedió a empezar a rellenar con ventonita el hueco de 6 metros de ancho por 1.5 de profundidad que dejó la vivienda afectada, describió Reyes De la Rosa.
“Estamos trabajando en el relleno de la oquedad que quedó para que después hagamos la reparación de drenaje y así estar en condiciones de reincorporar a las familias”, explicó el funcionario.
Añadió que no tendría sentido permitir que los afectados vuelvan a sus hogares, pues no contarían con el servicio de agua, debido a que la red hidráulica que les abastece el líquido se fracturó con el hundimiento.
“En dos semanas estaremos concluyendo el relleno del predio y la reparación de la tubería para regresarlos a sus hogares”, dijo.
Detalló que los estudios de geofísica en el sitio fueron realizados por la UNAM y expresó que —al parecer— no había una mina debajo de la casa, lo cual podría descartar mayores riesgos en el subsuelo, sin embargo, agregó que se debe aguardar a tener los resultados.
Dijo que a cada familia se le dio entre 3 mil y 3 mil 500 pesos para rentar por un mes una vivienda mientras se realizan las obras de reparación.
Reconstruirán vivienda
En el caso de la vivienda que debió ser demolida por el hundimiento, Jorge Reyes aseguró que la delegación cubrirá los gastos para construir un “pie de casa”, es decir, un inmueble conformado por una planta baja en la que haya baño, cocina y dos recámaras. La vivienda que se derrumbó tenía unos 50 años de antigüedad.
