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La Asamblea arrancó ayer la discusión para analizar si en la Ciudad de México las motocicletas deben o no verificar, ya que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) asegura que sí son foco de contaminación.
Lo anterior, debido a que en las calles de la capital circula una flota de 263 mil 778 motos registradas desde 2009. De esta cifra, 2 mil 11 motos son de 1986.
El Manual de Buenas Prácticas Ambientales y de Manejo de las Motocicletas en México, presentado por la Semarnat, estipula que este medio de transporte debe ser sometido a verificación vehicular debido a su crecimiento exponencial.
En un primer encuentro con autoridades de la Secretaria de Medio Ambiente (Sedema) capitalina y la presidenta de la Comisión de Movilidad en el órgano legislativo local, Francis Pirín, las organizaciones de motociclistas rechazaron someter a verificación sus unidades.
Candi Ashanti Domínguez Manjarrez, directora de Programación de Transporte Sustentable y Fuentes Móviles de la Sedema, comentó que hay estudios que refieren que la contribución de motocicletas respecto del contaminante de compuestos orgánicos volátiles (principal precursor de ozono en la Ciudad) es de 0.81 gramos por kilómetro por pasajero.
Incluso, que los gramos por kilómetro por pasajero fueron comparados con taxis (0.15), autobuses (0.01) y el Metrobús (0.003), donde resultó que la emisión de las motocicletas es mil veces más.
Francis Pirín dijo que es necesario conocer la opinión de los especialistas, las organizaciones y el Gobierno para ver lo que más convenga en torno a la verificación de este tipo de transporte.
“Mi postura es que debemos tener un equilibrio, no es lo mismo una motoneta que una moto de muy alto cilindraje. Tenemos que revisar lo que sea mejor para la ciudadanía, todos nos movemos, los peatones, los ciclistas, los automovilistas, de ahí que tenga que ser una regulación que funcione para la Ciudad y para los ciudadanos”.
Según el manual se tiene que garantizar que el costo de la verificación no sea alto, para no desincentivar el uso de la motocicleta.
Además de realizar la verificación con equipos indicados en la normatividad, que sean efectivos y que puedan concesionarse a los fabricantes, distribuidores y centros de mantenimiento de motocicletas.
Desde el año pasado, la diputada local del PRD insistió en la necesidad de tener un padrón para definir cuántas motos son de uso mercantil y cuántas particulares.