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Autoridades capitalinas aplicarán cuestionarios en los centros de salud para identificar a personas con problemas de bulimia y anorexia.
Se trata de un cuestionario denominado SCOFF (Sick- Control-One-Fat- Food), que consta de cinco preguntas para saber si la población tiene problemas alimenticios.
El cuestionario es parte de una estrategia de la Secretaría de Salud capitalina en coordinación con el Instituto Nacional de Psiquiatría, la cual incluye capacitación para personal de la salud, con el objetivo de detectar casos de bulimia y anorexia en las personas en los hospitales Rubén Leñero, Inguarán y Pediátrico Iztapalapa.
El titular de la Secretaría de Salud capitalina, Armando Ahued Ortega afirmó que la estrategia se debe manejar de manera multidisciplinaria, pues los trastornos alimenticios tienen que ver con la salud mental: “Esto tiene que ver con el estrés, con la ansiedad, insatisfacción del cuerpo o la insatisfacción de que no estudian, no trabajan, de tal manera que este tema tiene un componente sicológico y mental y se tiene que abordar de esa manera”.
Estadísticas. Durante la segunda sesión del Consejo para la Prevención y la Atención de la Obesidad, Sobrepeso y Trastornos de la Conducta Alimenticia, Ahued informó que la mitad de las niñas de entre nueve y 13 años en la Ciudad están insatisfechas con su imagen corporal, lo que puede desencadenar enfermedades como las descritas.
Dijo que el problema de la insatisfacción corporal también atañe a la población juvenil, pues una encuesta hecha a 300 mil jóvenes de entre 14 y 29 años en la CDMX arrojó que 23% no estaba satisfecho con su aspecto físico.
En la Ciudad de México y municipios conurbados, dijo, la prevalencia de enfermedades como anorexia es del 0.5%; bulimia, 1%; y 1.4% para el trastorno por atracones.
