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El presidente Nacional de la Confederación Nacional de Industriales de Metales y Recicladores , A.C (Conimer) Francisco Uriostegui Pineda, se sumó a la iniciativa del jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera , de incrementar el salario mínimo a los trabajadores de la Ciudad de México.
“Así como hemos denunciado a servidores públicos por actos reprobables que dañan a la sociedad y directamente a nuestro sector, también se nos hace justo aplaudir los aciertos de nuestros gobernantes cuando hacen a un lado sus intereses personales y privilegian los intereses de su pueblo, actuando en su defensa, como es su caso”, declaró Uriostegui.
En entrevista, luego de confirmar un encuentro con el mandatario local, se congratuló de que cesaron la persecución y las detenciones por parte de la autoridad capitalina en contra de los casi 400 mil trabajadores que se dedican a reciclar fierros viejos, colchones, refrigeradores y otros enseres domésticos en la capital.
Además manifestó su confianza de que hoy cuando arrancan una serie de mesas de trabajo con distintas autoridades capitalinas se trace la ruta para permitir que los “ropavejeros” puedan regularse e incluso afiliarse al Seguro Popular.
Uriostegui Pineda confirmó que también hubo reuniones con la titular de la Secretaria del Medio Ambiente, Tanya Müller, y con Rubén Lazos Valencia, director General de Regulación Ambiental.
Aseguró que hay una muestra clara de compromiso por parte del secretario de Movilidad, Héctor Serrano, en proporcionar placas especiales para ser identificados como recicladores regularizados y comprometidos con el medio ambiente.
“Este gremio que está conformado por una cadena productiva, no amafiada y sí dispuesta a dialogar está comprobando que en el gobierno capitalino por fin se está acortando la distancia abismal entre gobierno y sociedad”, señaló.
Recordó que hace unos días frente al presidente de la Comisión de Gobierno en la Asamblea Legislativa, Leonel Luna, se dejó claro que la reforma al artículo 277 Bis del Código Penal para la Ciudad de México es totalmente violatoria de los derechos de los recicladores para trabajar con libertad y en paz.
Luna Estrada aclaró al representante de Conimer que en ningún momento se pensó en perjudicar al gremio de los perifoneos que se conocen también como ropavejeros o chachareros ya que su oficio es una tradición que desempeñan desde tiempos inmemorables.
A quien se busca castigar, dijo, es a aquellos que ciertamente recogen la basura en los negocios y en la casas para después tirarla en las barrancas, los ríos, las áreas verdes o tiraderos clandestinos al aire libre.
