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La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) expresó su indignación por el cautiverio y tortura del que fue víctima el pequeño Antony y exigió abatir la impunidad ante estos hechos de maltrato infantil; lamentó que autoridades de la Ciudad de México usen políticamente el caso.
Luego de que el pasado 28 de junio las autoridades locales hallaron al pequeño en la colonia Gabriel Hernández de la delegación Gustavo A. Madero, la Redim señaló que este caso refleja una de las más graves expresiones de violencia contra la infancia. Ante ello, la asociación exhortó al Estado mexicano llevar a cabo acciones de prevención eficaces para proteger a niñas, niños y adolescentes.
“El caso de Antony muestra la imperante creencia cultural y social que considera a la niñez como propiedad, negándoles sus derechos y quedando a merced del poder de los adultos que se considera con legitimidad para ejercer violencia física, emocional y/o sexual contra niñas, niños y adolescentes”, indicó la Redim.
Asimismo, enfatizó que “ninguna violencia contra niñas y niños es justificable” y que una de las mejores formas de protegerles es frenar la impunidad frente a la violencia familiar e involucrarles de forma participativa en la creación de entornos seguros, dándoles herramientas que les permitan ser protagonistas de su propio proyecto de vida.
Lamentó el manejo del caso que están realizando las autoridades locales, quienes sin asumir autocríticamente sus omisiones para permitir que por años el niño viviera en cautiverio en su jurisdicción, ahora se presenten como sus ‘salvadores’.
“Redim observa con preocupación un alto riesgo de revictimización de Antony, y que después del uso mediático del caso sea enviado nuevamente a cautiverio ahora en un albergue del DIF. Es necesario tener presente que las autoridades están obligadas a buscar a la familia del niño hasta el cuarto grado de parentesco, ofrecer todos los apoyos posibles y seguimiento profesional para que goce su derecho a vivir en familia”, expuso la asociación.
En un comunicado de prensa la Redim exhortó a la procuraduría de justicia, a la procuraduría de protección de niñas, niños y adolescentes y a la delegación Gustavo A. Madero a brindar a Antony tratamiento profesional del más alto nivel posible y descartar la posibilidad de colocarlo en un albergue evitando aislarlo nuevamente e incrementar el daño psicológico, identificando familiares hasta el cuarto grado de parentesco, de no ser así integrarlo a una familia sustituta o determinar mediante un juez que sea candidato a adopción.
Solicitó establecer mecanismos de denuncia ciudadana que permitan la coordinación de las autoridades para atender de forma oportuna y eficiente los casos potenciales en los que se encuentre en peligro los niños.