Más Información
metropoli@eluniversal.com.mx
Los opositores a la Línea 7 del Metrobús acudirán el mes próximo a París, Francia, con el fin de presentar una queja ante el grupo de liderazgo climático C40, que reúne alcaldes de todo el mundo, pues sostienen que el nuevo corredor de transporte público viola acuerdos de este organismo suscritos por el Gobierno de la Ciudad de México.
Mauricio Soto, presidente de la organización Control Ciudadano y ex funcionario del Sistema de Transporte Eléctrico (STE), comentó que a fines del año pasado los alcaldes del C40, incluido el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, se comprometieron a prohibir en 2025 el uso de autobuses a diésel por ser contaminantes y producir sustancias nocivas para la salud; a su vez, mientras llega el plazo, plantearon dejar de introducir este tipo de transporte e impulsar la adquisición de autobuses híbridos o eléctricos.
Víctor Juárez, vecino de San Miguel Chapultepec, añadió que días después de esos acuerdos, en Londres, Inglaterra, se anunció la puesta en circulación de 50 autobuses eléctricos; en contraste, nueve meses después el Gobierno capitalino indicó que usaría en la línea 7 del Metrobús 90 camiones de doble piso que usan diesel.
“Vamos a llevar el tema al C40, tanto con una queja que presentemos en oficialía de partes como con una audiencia que solicitaremos a Anne Hidalgo, alcaldesa de París y líder de este organismo”, expresó Juárez.
Soto comentó que desde 2013, cuando estuvo en el STE se hicieron pruebas con autobuses eléctricos chinos con la intención de introducirlos en la Ciudad, pero el proyecto no se concretó porque “no hubo rentabilidad política como en la línea 7”, acusó.
Precisó que se encuentran “evaluando los alcances del C40, pero esperamos que por lo menos los demás alcaldes exhorten al jefe de Gobierno a cumplir los acuerdos”.
En tanto, Gustavo García, habitante de la colonia Ampliación Granada, añadió que al ir a la cumbre C40 “buscamos exhibir la incongruencia de la firma de estos acuerdos” por parte del Gobierno de la capital del país.
Los inconformes aseguraron que irá a Francia una comisión de aproximadamente tres opositores de la Línea 7 a fines de agosto próximo o inicios de septiembre y pagarán los gastos con sus propios recursos.
Eduardo Farah, coordinador del Comité Ciudadano en la colonia Chapultepec Polanco, expuso que las emisiones de los vehículos que usan diésel son dañinas y se presentan enfermedades respiratorias en la población.
La Línea 7 del Metrobús correrá de Indios Verdes, en el norte de la Ciudad, a la Glorieta de Petróleos, en el poniente, además de contemplarse un servicio complementario para ir de este punto hasta la zona de Santa Fe; la obra pretende mover más rápido a 130 mil personas diarias.
La construcción de esta obra fue impugnada con un juicio de amparo de la Academia Mexicana de Derecho Ambiental (AMDA), debido al cual las autoridades sólo pueden construir el carril confinado de concreto, pero está pendiente la sentencia definitiva.
Los vecinos que rechazan la creación del nuevo Metrobús señalaron que no permitirán que sean talados más árboles en la calzada de los Misterios, por donde también pasará este corredor de transporte con el fin de conectar hacia Indios Verdes.
Reprocharon que en la actual administración disminuyeron las líneas de transporte eléctrico como los trolebuses y que tampoco se ha sacado de circulación la totalidad de los microbuses, que son obsoletos.
