Más Información
david.fuentes@eluniversal.com.mx
Un niño de nueve años murió y seis más resultaron lesionados, dos de ellos de gravedad, por el choque de dos camionetas la mañana del jueves frente a la Central de Abasto.
Según el reporte inicial de la policía capitalina, el incidente fue provocado por el tripulante de una camioneta Jeep Cherokee, quien circulaba a a exceso de velocidad.
Debido al fuerte impacto, Alberto, de nueve años e hijo de la conductora, salió disparado hacia el pavimento y murió de manera instantánea al caer, pues no llevaba puesto el cinturón de seguridad; dos menores también salieron de la unidad y fueron trasladados en helicópteros de la policía capitalina al Hospital Pediátrico de Legaria, donde los reportan graves de salud.
Tras el percance que derivó en la muerte del niño, el conductor de la camioneta escapó a pie; autoridades ya buscan al propietario de la Jeep con placas MGT-61-32. La escuela se deslindó de los hechos.
Al detallar que el vehículo era propiedad de la mujer identificada como Lizeth “N”, quien todos los días trasladaba a los amigos de sus hijos a la escuela, la unidad no cuenta con seguro, por lo que la mujer —trasladada a un hospital para recibir atención médica— se tendrá que hacer responsable de los daños ocasionados.
Indagatoria. Por este hecho, la procuraduría capitalina inició una investigación para deslindar responsabilidades. En este sentido, se analizan los videos de las cámaras de vigilancia del C5 y en los que se observa como ambos conductores cometieron errores básicos al manejar.
El conductor de la Cherokee conducía a exceso de velocidad y se pasó una luz roja, mientras que la mujer que llevaba a los niños dio una vuelta prohibida, además de que en el lugar no había señalamiento de vialidad alguno.
El delito que se imputa al presunto responsable es el de homicidio imprudencial. En el caso de la mujer, se espera que se recupere de sus heridas para rendir su declaración.
Muertes en accidente también incrementaron. Los homicidios imprudenciales relacionados con accidentes automovilísticos incrementaron este año.
Según estadísticas de la procuraduría capitalina durante el año pasado se contabilizaron 30 muertes por esta situación, mientras que en el primer semestre de 2017 sumaron 20.
De esta cifra, siete corresponden a menores atropellados, cinco ciclistas y el resto a conductores que debido al exceso de velocidad combinado con el alcohol, murieron en sus vehículos, esto a pesar de las medidas que han implementado las autoridades.
Debido al nuevo sistema de justicia penal los responsables han recibido beneficios, pues de los imputados, apenas dos están en prisión.
Al resto se le otorgó el perdón o tuvo que resarcir el daño, por lo que siguen el proceso en libertad con algunas restricciones, principalmente el retiro de su licencia de conducir.
