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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
La delegación Xochimilco corre el riesgo de caer en una crisis hídrica si se permite el asentamiento de 34 obras irregulares, que incluye cinco megaproyectos comerciales, los cuales podrían consumir hasta un millón de litros de agua diariamente.
Así lo alertó el jefe delegacional, Avelino Méndez Rangel, quien aseguró que para la construcción de estas obras, en su mayoría desarrollos inmobiliarios, hay permisos apócrifos.
Denunció que la autoridad central, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda o incluso el Sistema de Aguas de la Ciudad, no dice nada.
Acompañado del líder de la bancada de Morena en la Asamblea Legislativa, César Cravioto, el delegado de Xochimilco aseguró que con estas obras se corre el riesgo de que la demarcación no sea declarada Patrimonio Cultural y de la Humanidad.
Aunado a este problema, está la edificación desmesurada de 400 casas más, que pretenden ser construidas en la zona.
Entre las obras están la Plaza Terrazas Arenal, Chedraui Santiago Tulyehualco, Tepepan Country Club, Paseos Xochimilco y Wall Mart-Sams Ex Pumitas, explicó.
En estos lugares, señaló Avelino Méndez, se consumirían más de un millón de litros diarios de agua, que equivalen a la dotación del líquido a 100 mil habitantes.
Argumentó que, en algunos casos, los responsables de las edificaciones han falsificado los documentos, por lo que ya se han presentado las denuncias correspondientes.
Mencionó que ya se acudió al Tribunal de lo Contencioso para entregar los documentos que demostraban la ilegalidad en que han incurrido las constructoras; sin embargo, no se atendió esta denuncia.
“No hay nada, ni papeles que avalen la construcción, y no se ha puesto un solo dedo para poner a las empresas en orden, pese a que se atenta contra el paisaje cultural y se pretende sobreexplotar los mantos acuíferos”, expresó
el delegado.
Por ello, pidió al titular de la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, que se reconsideren estos proyectos, desde los permisos otorgados por las secretarías de Medio Ambiente (Sedema) y Movilidad (Semovi).
César Cravioto aclaró que Morena no está en contra de la inversión privada ni del desarrollo, sino de que las construcciones atenten contra la vialidad y la viabilidad de la capital.
“Las crisis ambiental y de movilidad provocadas por megaproyectos afectan el gran pulmón de la ciudad que es Xochimilco. No podemos anteponer ningún interés particular al colectivo”, argumentó el coordinador parlamentario de Morena.
La diputada Flor Ivone Morales pidió al Gobierno de la Ciudad respetar el área natural protegida de Xochimilco e hizo un llamado al Sistema de Aguas local y a la Contraloría capitalina a comprender que se trata de un área lacustre y que la interminable espiral de construcciones daña la zona chinampera y lacustre.
