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La construcción de un corredor de restaurantes y mercado gourmet denominado Barrio Santa Fe incurre en violaciones a la normatividad en uso de suelo, determinó en una resolución la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT) y pidió a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) iniciar un juicio de lesividad, pues fueron las autoridad las que avalaron el uso de suelo comercial en el predio.
En un andador peatonal conocido como Calle 1 en Santa Fe, de 5 mil 658 metros cuadrados, se construyen seis espacios comerciales para venta de alimentos; sin embargo, la PAOT realizó una investigación a raíz de quejas vecinales que señalan que el terreno no tenía ese uso de suelo.
Conforme al actual Plan Parcial de Desarrollo Urbano de Santa Fe, el predio cuenta con uso de suelo de espacio abierto (EA), el cual sólo permite construir bibliotecas, librerías y espacios recreativos en 5% de la superficie, pero se edifica en la mitad del área, indicó la procuraduría ambiental en su resolución emitida el 21 de octubre pasado, de la cual se tiene copia.
A su vez, detalló que el corredor gastronómico se edifica a partir de un polígono de actuación aprobado por la Seduvi que aplica a los inmuebles de Antonio Dovalí Jaime 75, donde hay una torre de 10 pisos con uso de suelo de oficinas y servicios, así como el terreno de Calle 1, relotificado como Antonio Dovalí Jaime 95.
Como la torre en el número 75 tiene permitidos hasta 15 niveles, el polígono permitió “relocalizar” los usos de suelo y el potencial de construcción en el predio de Calle 1.
Pero la PAOT resolvió que los usos de servicios y oficinas “no son relocalizables al predio número 95 de la misma calle, debido a que se encuentran prohibidos en la aplicación de la Norma General de Ordenación Número 5, referente al área construible en zonificación y uso de suelo en espacios abiertos del Programa Parcial de Desarrollo Urbano local vigente”.
Barrio Santa Fe está a punto de quedar concluido, según se observó en un recorrido, y de acuerdo con vecinos inconformes que se manifestaron la semana pasada, el predio fue arrendado por la paraestatal Servimet a Jorge Aboumrad, quien también es propietario de Antonio Dovalí Jaime 75.
