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Durante un operativo forestal en la delegación Milpa Alta para combatir la tala ilegal, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) intervino 11 centros de transformación de materias primas forestales.
Autoridades de la demarcación indicaron que ayer por la mañana se efectuó la acción preventiva en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Policía Federal, elementos de la Gendarmería y el Gobierno de la Ciudad de México.
A través de un comunicado explicaron que el objetivo fue evitar la tala inmoderada de árboles y la proliferación de aserraderos clandestinos.
Mencionó que en el operativo participaron 950 elementos: 60 de la Sedena, 120 de la Policía Federal, 230 de la Gendarmería, 400 agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina, así como 90 de Participación Técnica, 30 de Profepa y 60 del gobierno central.
La Profepa, en su página de Twitter, informó que en dicho despliegue se logró intervenir 11 centros de transformación de materias primas forestales con órdenes de inspección.
Otros incidentes. La tala ilegal de árboles no es un problema exclusivo de Milpa Alta; en la Ciudad de México existen otros espacios donde operan los llamados talamontes.
En noviembre de 2014, por ejemplo, elementos de la SSP detuvieron a tres hombres en el momento que cortaban árboles de manera clandestina en el poblado de Santo Tomás Ajusco, en la delegación Tlalpan.
Los agentes de la Policía Metropolitana realizaban labores de patrullaje para prevenir delitos ambientales en esa zona boscosa.
Fue en el predio La Placa donde los uniformados hallaron a tres personas talando árboles, y al no contar con los permisos correspondientes para realizar esta actividad, los hombres de 29, 25 y 80 años fueron detenidos.
Los tres quedaron a disposición de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en Delitos Ambientales y en Materia de Protección Urbana (Fedapur), y una camioneta de tres y media toneladas en la que ya habían cargado varios troncos.
