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Tras obtener el consentimiento de pobladores de San Miguel Ajusco, la delegación Tlalpan reinició las obras para mejorar el abastecimiento de agua potable suspendidas desde el viernes pasado. Los trabajos que se efectúan en Santo Tomás Ajusco, como parte de la misma obra, permanecen suspendidos.
La decisión de parar la obra en ambos puntos se tomó luego de que seis trabajadores fueron secuestrados por comuneros en Santo Tomás Ajusco la noche del jueves.
Este lunes la titular de la demarcación, Claudia Sheinbaum, dialogó con una comisión de diez pobladores sobre el proyecto que se realiza en la región. El objetivo era explicarles y entregarles el proyecto ejecutivo para que lo estudiaran.
La comunidad de San Miguel respaldó la obra hidráulica, pero los comuneros de Santo Tomás pidieron detener los trabajos porque piensan que el agua se va a llevar a otro lado, lo cual negó la delegación.
Debido a que su explicación no fue suficiente, autoridades de Tlalpan acordaron con la gente de Santo Tomás realizar una segunda reunión el 18 de abril.
Previo a este encuentro, se efectuarán tres mesas de trabajo con el área de operación hidráulica para despejar dudas a los opositores.
Además, el miércoles habrá un recorrido en la zona de las obras con los vecinos para explicarles a detalle los trabajos que se llevan a cabo.
A la reunión efectuada el lunes pasado acudieron los subdelegados de Santo Tomás y San Miguel Ajusco, el presidente de bienes comunales del Ajusco, el subsecretario de programas delegacionales, Francisco Acevedo, el diputado Carlos Hernández Mirón y Claudia Sheinbaum.
Autoridades de Tlalpan aclararon que a la reunión invitaron a la comunidad de San Miguel, aunque estuvo de acuerdo con las obras desde febrero, porque se suspendieron los trabajos en ambos pueblos como medida de seguridad.
"En realidad hay unanimidad en la habilitación de la red, pero surgió un grupo que lo rechazaba", apuntaron.
A la reunión asistieron cerca de 150 habitantes de ambos poblados, pero los funcionarios sólo recibieron a una comisión de diez.
El acuerdo fue que la obra sólo podía continuar en San Miguel Ajusco y en Santo Tomás no se continuarán los trabajos. Después de la reunión del 18 de abril, en la cual se revisará nuevamente el programa ejecutivo y la delegación recibirá observaciones, se podrá determinar cuándo se reanudan las labores.
Ayer, Sheinbaum mencionó que la obra lleva un avance del 75% y se requieren tres o cuatro semanas más para que termine.
egm
