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Transportistas de la Ciudad de México piden a las autoridades capitalinas una tarifa justa y digna, señalaron que el incremento de un peso en las tarifas y los incentivos fiscales, ambos publicados el pasado jueves en la Gaceta Oficial, no satisfacen las necesidades que existen actualmente en el transporte público y auguraron que en poco tiempo las unidades se chatarrizarán por la falta de mantenimiento.
“Tener la tarifa de transporte más baja de todo el país nos condena a la chatarrización de los vehículos con que se presta el mismo, se habla de no perjudicar la economía de los ciudadanos, pero ¿acaso no se perjudica más a los ciudadanos dándoles el servicio con unidades que han rebasado su vida útil?”, señaló en conferencia de prensa, Francisco Carrasco Rodríguez del Bloque de Agrupaciones.
Los integrantes del grupo denominado Transportistas de la Ciudad de México en lucha por una Tarifa Justa y Digna manifestaron su desacuerdo con el incremento y señalaron que esta tarifa refleja la falta de apoyo de las autoridades capitalinas para el mejoramiento del servicio público.
“Esta tarifa limita a la ciudadanía para tener el servicio adecuado y el transporte que merece la Ciudad de México, esto es un incremento emergente, pero no ayudará a la realidad en la que vive el gremio”, acusó José Luis Tenorio, representante de la Ruta 18.
Los transportistas indicaron que con este aumento les es imposible poner en marcha nuevos corredores viales, lo que detendrá el proceso de modernización del sistema de transporte público concesionado y la aspiración de contar con tecnologías ambientales sustentables que abonen el abatimiento de la contaminación existente en la megalópolis.
“No nos alcanza, es ridículo este aumento, el compañero conductor va a seguir sufriendo, va a verse obligado a parar su unidad y el servicio se va a ir deteriorando; no repara el daño del último incremento al combustible”, explicó Francisco Carrasco.
Denunciaron que sólo tuvieron tres reuniones con el Secretario de Movilidad de la Ciudad, Héctor Serrano, pero que nunca hubo una negociación, sino un aviso sobre los aumentos.
“Nos reunimos tres veces para una supuesta negociación, pero en estas reuniones nunca se nos dijo ni cuándo, ni dónde del aumento; nosotros solicitamos desde el principio un aumento a microbuses y camioneta de 3 pesos, con eso medio resarciríamos el daño”, señaló Carrasco Rodríguez.
Este grupo de transportistas señalaron que no planean bloquear calles ni suspender las actividades, pero presentarán un proyecto a la Semovi y al Gobierno de la Ciudad de México para solucionar la problemática.
“Hemos sido respetuosos y sabemos la precariedad económica que estamos viviendo, prestaremos el servicio de manera puntual, obviamente la aspiración de cambiar las unidades por unas amables con el medio ambiente no es factible”, dijo.
