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Con el cuadro de Andrés Manuel López Obrador a sus espaldas, Martí Batres Guadarrama, dirigente de Morena en la capital del país, hace un análisis del partido en el que considera que están avanzando rápidamente con el ingreso de militantes de otros institutos, por lo que deberán ser muy cuidadosos en la selección de sus candidatos. Pese a ello, afirma que la tendencia de crecimiento ya es irreversible.
En su plática con EL UNIVERSAL también hace referencia a las diferencias que ha tenido con el jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, de quien dijo que utilizaba “métodos mafiosos”, a lo que simplemente refiere que sus palabras fueron sacadas de contexto.
La encuesta de EL UNIVERSAL les da una ventaja de 5 o 6 puntos con relación al segundo lugar. ¿Crees que esta tendencia es irreversible?
—Yo creo que va a seguir ampliándose. Yo creo que sí es una tendencia, porque además tiene múltiples factores que la sostienen. No se trata de un pico de mediciones, sino que tiene dos fuertes antecedentes: las elecciones de 2016 y las elecciones de 2015. Tiene además un contexto nacional: Morena se está convirtiendo en la primera fuerza política del país, tiene un repunte en la entidad vecina del Estado de México, donde Morena se disparó.
¿Cómo analizas al PRD en estos momentos?
—Hay un desgaste del que hemos hablado; tiene varias razones de ser y se está expresando con más fuerza, tiene que ver con la situación global del PRD, con el hecho de que Morena se está convirtiendo en la referencia de la izquierda, es el partido de izquierda en el país.
Tiene que ver con el desgaste de sus gobiernos delegacionales, con las malas decisiones de gobiernos…
¿Delegacionales o local?
—También local. Han tomado decisiones que no valoran autocríticamente, no tienen la flexibilidad para corregir y te pongo un ejemplo fresco: el tema del predialazo. No tienen sensibilidad para corregir y esto explica por mucho el comportamiento que ha tenido la ciudadanía hacia su partido, hacia ese partido.
Mucha gente del PRD se está viniendo a este partido.
—Es correcto, sobre todo del electorado común. El electorado que votaba por el PRD hoy está prefiriendo a Morena.
¿No preocupa que lleguen militantes que sólo busquen un espacio para las nuevas elecciones?
—Analizaremos caso por caso.
El caso Leticia Quezada, que anduvo en varias agrupaciones del PRD, luego se fue al gobierno y ahora está con ustedes, donde hay personas que no la quieren.
—Yo no he tenido comunicación con ella, no sé cuál sea su idea.
¿No preocupa que haya división?
—Hay dos espacios en el partido: uno es propiamente de quienes participan en Morena. Quien quiera estar en Morena se tendrá que ceñir a las reglas de Morena, y otro es el espacio de quienes no forman parte de Morena, no quieren formar parte, incluso son parte de otras fuerzas políticas, pero quieren apoyar el proyecto.
¿De esta primera parte que mencionas no les preocupan los ingresos?
—Analizaremos caso por caso, no quiero especular. Ahora sí, en virtud de cada solicitud de ingreso tendremos que analizarlos. Estamos buscando que en las candidaturas tengamos los perfiles más elevados.
Hablando de perfiles, sales muy bien evaluado en la encuesta de EL UNIVERSAL, incluso por arriba de Claudia Sheinbaum y de Ricardo Monreal, ¿qué te dice esto?
—Pues un estímulo para seguir trabajando. Esto me dice que tengo que trabajar, trabajar y trabajar a favor de la causa, eso es lo más importante.
¿Y de la candidatura?
—Esto que mencionas tú se deriva del trabajo que realizas en el lugar donde estás, eso es lo más importante… Ya hemos comentado que habrá una encuesta; participaré en esa encuesta y si la gano seré el candidato, pero de todas maneras eso no debe hacernos olvidar nuestro trabajo; no me distraigo, estoy atento, pero tengo una responsabilidad y estoy cumpliendo con esa responsabilidad.
Morena vive un momento similar al del PRD hace años, en el que lo más importante era ganar la interna, porque la elección venía por añadidura, ¿lo ves así?
—Se parece un poco, pero no vamos a caer en el conformismo, tenemos que trabajar mucho. Sabemos que hay adversarios, sabemos que se tiene que cuidar un buen posicionamiento día a día…
¿Hay adversarios adentro?
—No, los adversarios están afuera y me refiero básicamente al PRIAN. En Morena hay compañeros.
Hace unos días se dio a conocer un audio, ¿es tu voz la que se escucha?
—Creo que no se puede tomar como un punto de vista mío por muchas razones. Lo que yo diga políticamente finalmente lo diré frente a los medios de manera abierta y porque no se puede tener certeza de la continuidad lógica de cada expresión que se tenga en un audio de carácter privado…
Cuando se está en un ambiente privado se expresa uno con mayor libertad que frente a los medios.
—No es por eso, sino porque los contextos varían y, por otra parte, porque no se sabe cuál es la continuidad real en esa conversación, dónde está interrumpida, dónde está editada, qué se quería decir con una frase.
Lo que más llama la atención es que dices que Ricardo Monreal utiliza métodos mafiosos. ¿Cómo lo explicas?
—Yo creo que la forma en que se da a conocer este conjunto de expresiones tiene sus propios límites, son trascendidos, no es una declaración que yo le haya dado a nadie…
¿Pero es una expresión tuya?
—Totalmente fuera de contexto, totalmente desvirtuada, no la puedo asumir como tal.
¿Entonces te desdices?
—No. Simplemente no tiene el valor político que tendría un análisis o una declaración política sobre el tema.
Hoy lo pregunto, ¿consideras que Ricardo Monreal utiliza métodos mafiosos en su forma buscar la candidatura?
—No podría hacer yo esa valoración política.
¿Hay afinidad con él en su forma de operar?
—Seguramente entre una multiplicidad de liderazgos y experiencias hay formas distintas de ver la vida y de ver el quehacer político, pero también hay puntos de coincidencia.
