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diana.fuentes@eluniversal.com
Hasta 35 mil pesos mensuales, sin deducir impuestos, cobran franeleros en la delegación Cuauhtémoc, lo que equivale a un sueldo de profesionistas con posgrado.
De acuerdo con un mapeo elaborado por autoridades de esta demarcación, por lo menos en 15 de 33 colonias aún hay presencia de franeleros.
El jefe delegacional, Ricardo Monreal Ávila, reconoció que una de las problemáticas de seguridad y protección ciudadana en la vía pública es la presencia de niños, adolescentes y adultos que se autonombran viene-viene o aparta lugares.
La mayoría de las quejas en la demarcación, según datos del delegado morenista, han sido por el uso de espacios por parte de los franeleros, debido a la obstrucción de entradas o zaguanes de los vecinos de distintas colonias.
Además, por cobrar tarifas altas a los conductores por el uso de suelo de los automóviles, así como por faltas administrativas y comisión de delitos por parte de los franeleros, asociados al consumo de alcohol, drogas e incluso venta de las mismas.
De acuerdo con el político zacatecano, la presencia de los viene-viene también ha fomentado el pandillerismo o robo de autopartes en algunas zonas de la Cuauhtémoc, al grado de llegar a la agresión contra transeúntes.
Al realizar un mapeo sobre la presencia de esta red de franeleros, que ya fue dada a conocer a la procuraduría capitalina para su conocimiento, la Cuauhtémoc comprobó que de enero a julio del año pasado, en varias calles de las colonias Algarín, Buenos Aires, Condesa, Cuauhtémoc, Juárez, Obrera, Roma, San Rafael, Santa María la Ribera y Tabacalera aún no han sido retiradas por completo estas personas de la vía pública.
En cambio, en la colonia Buenavista, sólo las calles de Luis Donaldo Colosio y Bernal Díaz registran franeleros.
Según el mapeo, en la colonia Centro sólo seis calles faltan por intervenir, entre las que destacan Artículo 123, Balderas y Donceles. En la Doctores, las calles de Doctor Navarro, Niños Héroes y Doctor Jiménez.
En la colonia Guerrero sobresalen Zarco, Arteaga, Ignacio Allende; mientras que en la colonia Esperanza las calles que circundan la Central de Bomberos y Calzada de la Viga.
Monreal Ávila destacó que una de las ventajas donde se encuentran los parquímetros es que no hay una sola presencia de franeleros y esto contribuye a reforzar la seguridad.
De la misma manera, se logra disminuir la contaminación visual y auditiva, se reducen los contaminantes por CO2, se favorece el uso del transporte público y la bicicleta.
“La prevención del delito se puede definir en sus diversas acepciones, como el anticiparse para impedir a alguien cometer una conducta antiju-rídica, la prevención social de la violencia y la delincuencia es el conjun-to de políticas públicas y acciones orientadas a reducir factores de riesgo y eso es lo que estamos haciendo en la Cuauhtémoc”, aseguró Monreal.
