Después de 84 años de ejercer el servicio de recolección y barrido en la capital del país, más de 17 mil trabajadores adscritos al Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México aseguraron que existe el riesgo de que este sector sea privatizado.
Hugo Alfredo Alonso Ortiz, secretario general de la Sección 1 del Sindicato de Trabajadores de Limpia, alertó en entrevista que como primer paso se pretende cambiar la Ley de Residuos Sólidos para que las personas sean multadas por no separar la basura y las empresas sean las que reciban el monto económico.
Al acudir a la Asamblea Constituyente en protesta de un intento de privatización en el proyecto de Constitución local, Alonso Ortiz dijo que se llegará hasta las últimas consecuencias para evitar que este servicio pase a manos de una empresa privada y se pretenda desplazar a los trabajadores.
“Haremos las protestas que tengamos que hacer, siempre hemos estado en la mejor disposición y no podemos permitir que se diga en la Constitución que cualquier empresa pueda venir, costear y privatizar el servicio de limpia”, precisó.
El diputado constituyente, Manuel Oropeza, mencionó que en la Comisión de Desarrollo Sostenible se aprobó un dictamen en el que se establece que el servicio de recolección de basura será un servicio público, pero que se le había retirado la exclusividad del Gobierno de la Ciudad para prestar el servicio.
“Eso lo han hecho en otras ciudades como Cuernavaca y de nada sirvió porque la empresa responsable dejó la basura más de 15 días y se tuvo que recontratar a los trabajadores del gobierno, privatizar no funciona porque dejamos las manos en particulares y estos pueden cobrar lo que quieran”, advirtió Alonso Ortiz.
En tanto, el presidente de la Comisión de Asuntos Laborales y Previsión Social de la Asamblea Legislativa, Juan Gabriel Corchado, adelantó que se alzaría la voz en caso de que se intente privatizar este servicio.
“De lo que se ha hablado son de tiraderos privados, donde empresas estarían dispuestas a abrir porque se vería como un negocio la recuperación de los desechos, la basura también es dinero porque también entre todo lo que tiramos hay productos que económicamente son viables”, aseguró el legislador local.
Corchado consideró que una opción que deberá ser analizada desde el gobierno capitalino es que en el manejo de la basura, las familias que viven de la separación se pueda dar la alternativa de que esta actividad quede en manos de este mismo sector para integrarlos y ayudarlos.
“Relegarlos sería un terrible error de la Ciudad y habría mucha inconformidad”, expresó el asambleísta de Nueva Alianza.